Vargas Llosa finalmente se compenetró con "El Quijote", libro que hoy considera "una historia inmensamente entretenida".
EFE
NUEVA YORK.- Los que se sientan culpables por jamás en su vida haber leído "El Quijote", o por haberlo tomado en reiteradas ocasiones con intención de leerlo, pero sin haber perseverado, pueden dejar de autoflagelarse.
El premio Nobel de Literatura peruano Mario Vargas Llosa reconoció en una conferencia en el City College de Nueva York que la primera vez que intentó leer el famoso libro de Miguel de Cervantes, cuando tenía 15 años, "fue un fracaso".
Coincidiendo con el cuatrigésimo aniversario de la publicación de la segunda parte del texto más célebre de la literatura hispana, Vargas Llosa conversó con el también escritor peruano Alonso Cueto sobre el clásico de Cervantes ante una audiencia de estudiantes e intelectuales.
El autor peruano explicó que fue en su época universitaria y después de leer "La ruta de Don Quijote", una recopilación de artículos sobre la Mancha de Azorín, uno de sus primeros escritores favoritos, que descubrió "la grandiosidad" de la novela de Cervantes.
El nobel peruano destacó que "El Quijote", más allá de ser un clásico de la literatura española, "es una historia inmensamente entretenida que define la condición del ser humano que, como el Quijote, tiene la necesidad de cambiar la realidad para que se parezca a sus sueños".
Esa voluntad de que la realidad se parezca a los sueños es, para Vargas Llosa, "lo que ha permitido al ser humano pasar de las cavernas y llegar a la era moderna para tocar las estrellas".
Por ello, el autor de "La casa verde" y "La fiesta del chivo" dijo que debe "empujarse a los jóvenes a leer el Quijote, pues además de vivir una aventura extraordinaria, uno descubre el poder extraordinario de la imaginación como motor de cambio del mundo en el que vivimos".