SANTIAGO.- Tras el éxito obtenido con la séptima entrega de la franquicia "Rápido y furioso", Vin Diesel decidió darle un giro a sus papeles de acción y se atrevió a meterse en el género de fantasía, con la película "El último cazador de brujas".
En ella, el actor interpreta a Kaulder, un guerrero y cazador de brujas, que en el siglo XIII fue maldecido con la inmortalidad por la Bruja Reina antes de matarla. Obligado a ver cómo todos sus seres queridos van muriendo, Kaulder debe pasar 800 años en la Tierra antes que regrese la Bruja Reina y logre obtener su ansiada revancha.
La película, que se estrena este 29 de octubre en Chile, cuenta con Diesel como protagonista, además de Rose Leslie ("Game of Thrones") y Elijah Wood ("El señor de los anillos) en el reparto, y cuenta con la dirección del estadounidense Breck Eisner.
"Soy fanático de 'Calabozos y dragones'", revela el actor. "Sin dudas es algo que jugó un papel importante en mi primera experiencia en el género de fantasía".
- ¿Te gustaría no envejecer y poder vivir por siempre, como Kaulder?
Lo irónico de eso, es que la inmortalidad, en la película, es una maldición. Y eso es lo que podrás ver en la película. Podrás ver cómo sería si fueras inmortal y tuvieras que despedirte constantemente de todas las personas que quieres, cómo te sentirías con eso.
- ¿Cuáles son los aspectos de ser inmortal que podrían resultar atractivos?
El concepto es que puedes ser inmortal, pero no vivir realmente. La importancia de encontrar algo por qué vivir, es uno de los temas de la película. Como una mitología, el concepto de inmortalidad para este personaje es algo con lo que debe luchar y algo que literalmente ha sido una maldición para él.
- ¿Crees en las maldiciones, brujas, o algo por el estilo?
Fui criado por una madre que era astróloga. Creo que, como artista, tienes que ser receptivo a toda clase de cosas. Tienes que ser receptivo a lo sobrenatural. Creo que mi amor por la fantasía me permite ser de mente abierta. Alguien que juegue realmente "Calabozos y dragones" será de mente abierta. Cualquier persona que se introduzca en el mundo paralelo de Tolkien tendrá una gran imaginación. Así que en varias formas, va de la mano con la imaginación. Si me niego a creer en algo, no creo que mi imaginación pudiese servirme como lo ha hecho hasta ahora.
