"Star Wars" es el primer largomentraje de Daisy Ridley. Antes trabajó en cortos y montajes teatrales.
Disney.MADRID.- Daisy Ridley es una de las actrices del momento. Su irrupción en la escena cinematográfica internacional protagonizando "El Despertar de la Fuerza", la nueva entrega de "Star Wars" que se estrena el próximo 17 de diciembre en Chile, está dando mucho que hablar.
Ser una desconocida fue precisamente lo que le permitió aspirar al papel de Rey, puesto que como ella misma reconoce, el equipo técnico de la nueva entrega de la "Star Wars" quería actores desconocidos.
La producción no necesariamente buscaba actores que manejaran todos los detalles de las primeras seis cintas, algo que favoreció a la británica, quien admite que la historia le era tan familiar como "un primo lejano".
Aunque reconoce que sus conocimientos sobre la saga eran limitados, también cree que conocía mucho más de lo que ella pensaba. "Al final es cultura popular. Conoces la historia casi inconscientemente", afirma.
Ridley recuerda que fue "extraño" cuando el director J.J. Abrams le dijo que la quería para el papel. "J.J. me llamó cuando estaba en el teatro para contarme que era la elegida (...) y fue muy raro porque tuve que volver a entrar a ver la segunda parte de la obra y no pude decirle a nadie lo que me había pasado. No pude decírselo a nadie en tres meses", cuenta entre risas.
Las primeras en enterarse de su logro fueron su madre y su hermana, a quienes les costó procesar la noticia, y su padre, a quien se lo contó mientras dormía.
Ocultarle a la familia y a sus amigos por qué se entrenaba de repente con tanta intensidad fue una de las experiencias más extrañas para la actriz de 23 años. "Entrené durante tres meses 5 horas al día. Es extraño cuando no puedes contarle a tu gente lo que estás haciendo. Ellos te preguntan que a qué te dedicas y tú solo puedes responder que estás yendo al gimnasio".
Precisamente sobre el entrenamiento, la actriz asegura que, a pesar de haber recibido instrucción de maestros en artes marciales, no domina esas técnicas y reconoce que la mayor parte del mérito en las escenas de acción es de sus dobles especialistas. "Mi entrenador sí que es un verdadero maestro. (...) Yo hice lo que pude, pero no puedo decir que lo controlo".
Ridley asegura que J.J Abrams nunca le explicó por qué la eligió a ella para el papel, y dice sentir presión ante el desafío, pero ni de lejos la que cree que soporta el director. "Él sí que tiene las ilusiones de millones de fans en sus manos".
"Mis primeras audiciones fueron horribles. Me encontraba fatal y sentía que algo no iba bien. Tuve muchísimas dudas", afirma la actriz, que confirma que el trato con leyendas de la saga y del cine como Mark Hamill, Harrison Ford o Carrie Fisher fue muy bueno.
"Fue muy motivador tener charlas con ellos y ver que son personas normales, nos dieron muchos consejos".
La actriz explica que su papel — que probablemente sea reconocido como la tercera mujer fuerte de la saga "Star Wars"— "tiene semejanzas con Padme y Leia, pero ellas nacieron con privilegios y Rey no. Vive literalmente el día a día".
A la pregunta sobre qué es lo que los millones de fans ven en la saga, Ridley responde que los valores universales que muestra. "Es un escape. Muestra cosas por las que todo el mundo atraviesa en la vida. Pierdes a gente que quieres, las relaciones empiezan y se acaban...".
También destaca lo divertidas que las películas pueden llegar a ser a veces y la mezcla entre lo real y lo fantástico como algunas de las claves que hacen que la gente adore "Star Wars" y espere con ansias la nueva entrega que se estrenará el próximo jueves.