Los abogados argumentaron que la comunicación confidencial entre el comediante y su esposa está protegida bajo la ley de descalificación conyugal de Massachusetts.
EFE
BOSTON.- Los defensores de Bill Cosby informaron que tratarán evitar que su esposa entregue un testimonio jurado en la
demanda de difamación presentada por siete mujeres, quienes acusan al comediante de acosarlas sexualmente décadas atrás.
El abogado de las denunciantes citó a Camille Cosby para que atestigüe el 6 de enero en un hotel en Springfield, Massachusetts.
Pero los defensores de Cosby presentaron una petición para anular el citatorio, argumentando que ella no tiene conocimiento de primera mano de los temas de la demanda.
Además, señalaron que cualquier comunicación confidencial entre el comediante y su esposa está protegida bajo la ley de descalificación conyugal de Massachusetts.
El abogado de las mujeres, Joseph Cammarata, había explicado que se debería poder cuestionar a Camille Cosby porque era la gerente de los negocios de su marido.
"Creo que ella tiene información que es relevante para el litigio en esta materia", indicó Cammarata.
Por su parte, los abogados del actor dijeron que Camille Cosby no tiene ninguna información sobre la veracidad de las acusaciones de las mujeres. También dijeron que esta solicitud es "un intento ligeramente disimulado de presionar al acusado al someter a su esposa a la vergüenza y turbación de responder a preguntas sobre sus supuestas infidelidades y conducta sexual inapropiada".
Las siete mujeres que demandan a Cosby por difamación forman parte de las aproximadamente 50 mujeres que han denunciado en el último año al comediante por contacto sexual no deseado. Ellas afirman en su demanda que el actor permitió que sus representantes las hicieran pasar por mentirosas cuando hicieron públicas sus acusaciones.
El comediante presentó una contrademanda contra las mujeres al principio de esta semana, en donde las acusa de hacer denuncias falsas de conducta sexual inapropiada para obtener un beneficio económico. Además, calificó la demanda como
"una campaña para asesinar" su reputación. 
