SANTIAGO.- "Más te vale que no lo arruines". Ésa fue la frase clave que hizo que el director Steve Martino se diera cuenta la gran responsabilidad que tenía en sus manos cuando aceptó traer de regreso a Snoopy y compañía en una película.
Y no es para menos. En una época en que los clásicos son presentados a nuevas generaciones —con aspectos y personalidades más modernas—, la gran crítica que surge de los antiguos fans es que éstos han sido arruinados, y que ya no tienen la escencia de lo que solían ser.
Martino no le había tomado el peso al trato que hizo hace casi tres años atrás, cuando aceptó dirigir "Snoopy & Charlie Brown: Peanuts, la película", que este jueves llega a los cines nacionales.
Según relata el director a Emol desde México, todo surgió cuando Craig Schulz (hijo del creador de "Snoopy", Charles M. Schulz) lo contactó para contarle del proyecto.
"Me dijo que vio algunas de las películas que habíamos hecho, entre ellas 'Horton y el mundo de los Quién' y vio todo el cuidado que tuvimos en ella cuando quisimos pasar esa historia a la pantalla grande. Me sentí honrado. Y me dijo que él y su hijo habían escrito una historia y yo me emocioné, porque soy un fan de Snoopy", cuenta Martino.
"Cuando llegué a mi casa y le conté a mis fans, ellos también se emocionaron. Pero después, a medida que avanzaba la conversación, me decían: 'Más te vale que no lo arruines'. Ahí fue cuando me di cuenta que había cierta presión, porque hay fans alrededor del mundo que aman a Snoopy y Charlie Brown", cuenta.
Sin embargo, eso no detuvo al ganador del Emmy, sino que todo lo contrario: lo motivó para realizar una especie de homenaje a Schulz y su legado. "Esta era una gran oportunidad de traer estos personajes a otras generaciones, para así mostrarles a nuestros hijos por qué los amamos", asegura.
"Es por eso que pasamos mucho tiempo investigando y centrándonos en cada detalle de la historia para que la película fuera como corresponde", agrega.
Lo más difícil, según cuenta, fue encontrar la esencia de la historia que querían mostrar. Para eso el equipo tuvo que investigar todo lo relacionado a Charlie Brown, desde las tiras cómicas hasta sus últimas apariciones en televisión.
"Lo revisamos a través de los años y nos preguntamos cuáles son las características que tiene para poder destacarlas. Así nos fijamos en sus derrotas, como cuando el volantín quedaba atrapado en el árbol cada vez que intentaba encumbrarlo, o cuando no podía pegarle al balón de fútbol", explica un tanto emocionado.
"Y lo que aprendimos fue que Charlie Brown es amable y perseverante. Su hermana Sally siempre lo molesta para que la ayude a hacer cosas y él siempre le tiene paciencia, es modesto y nunca se rinde. Aunque no le pegue a la pelota de fútbol o si pierde un juego de béisbol, siempre vuelve con una actitud positiva y lo intenta nuevamente. Y para nosotros eso era lo que debía mostrar la película y a partir de eso podíamos hacerlo más entretenido. Así que lo más difícil para nosotros fue encontrar el corazón de la película", asegura.
La inocencia infantil
"Snoopy & Charlie Brown: Peanuts, la película" se centra en el primer enamoramiento de Charlie Brown y cómo esto significa un gran problema a los 6 años de edad. Por supuesto, la cinta cuenta con las grandes aventuras de Snoopy y Woodstock en su lucha contra el Barón Rojo.
Una trama fiel a las aventuras creadas por Schulz en su origen y que no deja olvidar que los niños, pese a lo "agrandados" que se puedan mostrar en estos días, siguen siendo niños. Algo un poco alejado a las caricaturas que aparecen hoy en día en la televisión, las cuales se alejan de esta inocencia infantil y que por la misma razón deja en dudas el objetivo del director, de atraer nuevas generaciones.
"No creo que será difícil llamar la atención de los niños. Cuando estaba viendo el guión, las tiras cómicas y hacía esta película, mi hija menor estaba partiendo secundaria y tuvo su primer enamoramiento, el primer niño que le gustaba. La veía irse al colegio, y le pasaba lo mismo que le estaba pasando a Charlie Brown", cuenta entre risas Martino.
"Así que desde el punto de vista de la historia, Snoopy y Charles Schulz siempre mostraban historias de la interacción humana, acerca de gente real y de los sentimientos que tenemos y esos son sentimientos universales. Lo único que no hicimos para traer a nuevas generaciones fue presentar los personajes, ya que asumimos que todo el mundo sabe quiénes son", agrega.