SANTIAGO.- El llamado a boicotear los Oscar impulsado por Spike Lee y la esposa de Will Smith, Jada Pinkett Smith, se ha convertido en la principal preocupación de Hollywood, recibiendo apoyo, desconcierto e incluso muchos en contra de la iniciativa.
La última persona en manifestar su pensamiento acerca del llamado a no asistir a la premiación fue justamente una nominada al Oscar, la británica Charlotte Rampling, quien se encuentra compitiendo en la categoría a Mejor actriz por su papel en "45 años".
La intérprete salió al paso de la controversia y calificó el intento de boicot a la ceremonia como "racismo contra los blancos".
"Eso es racismo contra los blancos. Uno nunca sabe, pero quizás los actores afroamericanos no merecían llegar a la lista final de nominados", aseguró Rampling durante una entrevista con una radio francesa.
Con respecto a la posibilidad de que la Academia introduzca una regla por cupos para mejorar la diversidad en sus nominaciones, la actriz no se mostró muy contenta.
"¿Por qué clasificar a las personas? Hoy en día todos son más o menos aceptados. La gente siempre dirá: 'Él es es menos apuesto', 'él es muy negro', 'él es muy blanco'. Pero ¿por eso hay que crear miles de pequeñas minorías por todas partes?", aseguró.
El llamado a boicotear los Oscar que realizó Jada Pinkett Smith y Spike Lee, se debe a que por segundo año consecutivo ningún actor afroamericano obtuvo alguna nominación en las categorías principales.
