SANTIAGO.- Aunque Rodrigo González es el más desconocido de los comediantes que este año subirán a la Quinta Vergara para el Festival de Viña del Mar, su trabajo anterior no lo es. Para empezar, fue guionista de algunas teleseries juveniles de "Mekano", como "Don Floro" junto a León Murillo, y lleva once años haciendo stand-up comedy. Incluso, es dueño de un restaurant que mezcla la comida y el humor: Comedy Restobar
González tiene claro que esta presentación es la más exigente y masiva que ha tenido hasta ahora. Su récord es presentarse frente a seis mil personas, una cifra que dista mucho de las 15 mil de la Quinta Vergara y los cientos de miles de televidentes que lo verán desde sus casas.
Además, asume ser el más desconocido entre los humoristas en un año donde se presentan Ricardo Meruane, Edo Caroe, Natalia Valdebenito, Los locos del humor y Pedro Ruminot. Pero cree que eso también le juega a su favor. "La gente no espera mucho de mí y eso me da el factor sorpresa", dice.
De hecho, cuenta que cuando lo invitaron a ser parte del festival lloró muchísimo. "Lloro hasta con 'Los Simpson'", dice entre risas y agrega que cuando aceptó el desafío, sintió una gran responsabilidad.
"Yo creo que Alex y el canal me dieron la oportunidad porque tengo carrete haciendo stand-up. Partí con León Murillo, con Jorge Alís en el antiguo Cachafaz, que ya no existe; y porque la rutina le tiene que haber convenido no sólo a él, sino que a los directores de Chilevisión y de Viña del Mar. Porque todo esto pasa por muchos filtros, no es que uno diga: 'Ya, quiero ir a Viña', hacer casting y subirse arriba del escenario", asegura y añade: "Es una oportunidad que me dan y yo estoy trabajando para aprovecharla lo mejor posible".
Una rutina que viene trabajando hace casi un año. "Es parte de lo que yo hacía con Jorge y con León, y otra parte es nueva, es para Viña, específicamente para el Festival". Aparte de Murillo, partieron trabajando con él Héctor Escudero y Juan Pablo López, quien salió del equipo dando paso al periodista y comediante Andro Vukovic.
Blindado por su amigos
Pero la preparación va más allá del humor: González está siguiendo los consejos de Jorge Alís en cuanto a lo importante que es aprender a mantenerse calmado.
"Aparte de trabajar la rutina, estoy con un fonoaudiólogo para que se entienda todo lo que yo diga, que además me hace una terapia de relajación. Estoy con una programadora neuolingüística para superar la ansiedad. ¡Estoy más preparado que si fuera a la luna! Estoy con imanes en las orejas, con energía cuántica y tomando flores de Bach en vaso schopero. Estoy dándole con todo para llegar tranquilo a esa noche, porque da mucho miedo, da mucho miedo", confiesa.
Pero eso no es todo. Según cuenta, tendrá el apoyo de Murillo en una muela para bajar la ansiedad y avisarle si va muy rápido en la rutina. "Estoy súper blindado por mis amigos", asegura y agrega que ha recibido muy buenos comentarios acerca de su participación en el evento viñamarino: "La gente me tira hasta buena onda, porque me reconoce como un par".
Acerca del contenido de su rutina comenta que no es particularmente ácido ni va con rabia a la Quinta Vergara, pero sí va a aprovechar su momento para hablar de actualidad: "Creo que es el momento de empezar a decir las cosas a través de la comedia. La gente está esperando eso también: que uno, de alguna manera, sea una voz que reclame un poco en contra de las injusticias. No soy el paladín de la justicia ni de nada, pero soy un chileno común y corriente que tiene ganas de decir su par de cosas".