Gianfranco Rosi recientemente obtuvo el Oso de Oro en la Berlinale con el documental "Fuocoammare" sobre el drama de los refugiados.
EFE
En una carta abierta publicada por el diario "La Repubblica", el documentalista señaló que llegó el momento de reconocer a quienes viven en esos lugares, en pleno Mediterráneo, y que reciben y alojan desde hace años a miles de indocumentados que arriesgan sus vidas para huir de los conflictos y el hambre.
"Sería una decisión justa. Y dárselo a un pueblo en lugar de un individuo, un importante gesto simbólico", escribió Rosi.
El pedido del cineasta, ganador del León de Oro en Venecia en 2013 con "Sacro GRA" sobre la gente anónima que vive en la autopista circular de Roma, es apoyado por varios de sus colegas y otros artistas, entre ellos el premio Nobel de la Literatura, el italiano Dario Fo.
"Una idea bellísima (...) Los habitantes de Lampedusa y Lesbos han demostrado a toda Europa que se puede ser solidarios y tolerantes con los emigrantes, que se puede acogerlos sin levantar barreras y que eso no quiere decir trastornar sus vidas", explicó Fo.
La estatuilla del Oso de Oro, donada por Rosi a los habitantes de la isla, llegó este miércoles a Lampedusa de manos del doctor Pietro Bartolo, médico que ha salvado a muchos refugiados, y uno de los protagonistas de la producción.
"Él ha sabido explicar al mundo el mensaje de la solidaridad, que espero sirva para que los que tienen que tomar decisiones reflexionen y sepan escuchar", aseguró el médico en un video al diario "La Repubblica" al poner entre los aplausos la famosa estatuilla del oso en la pista del aeropuerto.
"Lo sentimos todos como si fuera nuestro", comentó por su parte la alcaldesa de la isla, Giusi Nicolini, conocida por sus medidas en apoyo a los inmigrantes.
Rosi, que elogió la mentalidad de pescadores de los isleños, dispuestos a "a dar la bienvenida a todo lo que llega del mar", algo que contrasta con las "vergonzosas barreras físicas y mentales levantadas hoy en día por algunos Estados europeos" contra los refugiados, es apoyado también por parlamentarios italianos del grupo Alternativa Posible.
En total, más de 110.000 migrantes y refugiados llegaron desde principios de 2016 a Europa, cruzando el Mediterráneo, principalmente a través de Grecia, anunció el martes la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), señalando al mismo tiempo, más de 410 personas han muerto o desaparecido en el mar
