Amber Heard y Johnny Depp acudieron al juicio en Australia.
EFE
SIDNEY.- La esposa de Johnny Depp, Amber Heard, se declaró culpable en el juicio por ingresar ilegalmente a dos perros a Australia y fue condenada a pagar una multa de 1.000 dólares australianos (unos 770 dólares).
Heard, de 29 años, fue acusada de ser la responsable de los dos Yorkshire terriers, Pistol y Boo. La multa queda, sin embargo, en suspenso a menos que cometa otro delito en las próximas cuatro semanas, según decidió la jueza Bernadette Callaghan.
Tanto Heard como Depp, de 52 años, acudieron en persona al juicio y sus abogados sorprendieron al tribunal pocos minutos después de la apertura de la audiencia cambiando la declaración a culpable.
La mujer estaba acusada ante el tribunal de Southport de falsificar su tarjeta de migración en abril del año pasado al no declarar que viajaba con dos mascotas cuando llegó al país junto con su esposo a bordo de un avión privado. Depp rodaba en Australia la quinta entrega de "Piratas del Caribe".
Los dos grabaron un video que mostraron ante el tribunal en el que lamentan los hechos, defienden las leyes australianas y dicen que estaban muy cansados y que olvidaron hacer los trámites aduaneros completos de los animales. A cambio de la declaración, la fiscalía dejó caer los cargos que enfrentaba por importación ilegal de perros, que le habrían podido implicar una pena de diez años de cárcel y una multa de 10.000 dólares australianos (76.000 dólares).
La pareja se llevó a los perros de vuelta en mayo después de que el entonces ministro de Agricultura del país, Barnaby Joyce, amenazara con sacrificarlos. Australia tiene leyes de cuarentena muy estrictas para que los animales no puedan traer enfermedades al territorio.