Gwen Stefani en los American Music Awards del año pasado.
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SANTIAGO.- Los últimos años no han sido fáciles para Gwen Stefani, la cantante que alcanzó la fama con No Doubt, en su vida personal. Todo derivado del quiebre que sufrió en su relación de de dos décadas con Gavin Rossdale, su ex esposo y padre de sus tres hijos.
Según contó en entrevista con la revista Harper's Bazaar, sus sueños "se destrozaron" tras el divorcio. "Todo lo que quería durante toda mi vida era tener guaguas, estar casada, como lo que tienen mis padres", explicó.
Eso sí, la artista de 46 años que ha mantenido una popular carrera solista y sumó a sus labores un rol en "The Voice", asegura que lo más difícil fue solucionar el tema de la custodia. "Fue una locura, porque no sólo hubo un quiebre en mi familia, sino que también se llevaron a mis hijos casi la mitad del tiempo, así que eso fue como '¡¿Qué?! ¿Qué fue lo que yo hice?'".
Si bien cuenta que pasó por una etapa de autocompasión, dice que usó esto de manera creativa, tal como hizo cuando terminó su relación con el bajista de No Doubt, Tony Kanal, en el disco Tragic Kingdom.
Esta vez, se inspiró en su trabajo solista This Is What the Truth Feels Like, pero dejó claro que no entregó demasiados detalles por el bien de sus hijos Kingston (10), Zuma (7) y Apollo (2): "Al ser famosa, piensas 'No puedo decir todo eso porque los voy a avergonzar o hacerlos sentir mal de alguna manera'".
Recientemente, la cantante inició un relación con el músico country Blake Shelton.
