Crítica cae rendida ante montaje teatral que trae de vuelta a "Harry Potter"

Es el tipo de obra que quieres describir en detalle, aunque sea sólo para poder descubrir cómo es que logró llevarse a cabo la magia…de alguna manera la narrativa de la señora Rowling tiene una fuerza adictiva.

J.K. Rowling, en su trabajo junto a los veteranos del teatro londinense Jack Thorne y John Tiffany, ha desarrollado una producción espectacular y ambiciosa, llena de efectos y giros que mantienen a la audiencia jadeante. ‘El niño maldito’ es una historia que no apuesta a lo seguro, no sigue el canon de Potter, y cambiará para siempre el modo en que los fans ven a uno de sus personajes favoritos.

Ocasionalmente, mientras los fans se mostraban impresionados ante cada nuevo dato, me sentí como un abstemio en una convención de taberneros. Pero Tiffany y su equipo montaron la pieza con tal seguridad, que finalmente empecé a entender el punto de ser un acérrimo defensor de Harry.

Bueno, fans de Harry Potter, se sentirán felices al saber que J.K. Rowling, Jack Thorne y John Tiffany crearon una producción teatral inmensamente maravillosa, una que alcanza el nivel de las anteriores historias de Harry Potter. Es, por sobre todo, realmente mágica. Como en otras obras de Rowling, este cuento — que está hecho a medida para el teatro— se centra en temas familiares y de amistad, desarrollando ambos con nuevos y antiguos personajes, de una manera significativa y creíble.

Lo admito: Fui al Palace Theatre como un escéptico. Dudaba que el dramaturgo Jack Thorne (en su trabajo junto a Rowling) pudiera dar con el toque mágico que permitiera a esta historia cobrar vida. Y estaba muy convencido de que los trucos del director John Tiffany y el ilusionista Jamie Harrison no estarían a la altura de los increíbles efectos CGI de las películas. Pero eso quedó atrás. La obra es un triunfo, y aunque tiene algunos leves puntos a mejorar, es un triunfo en todos los aspectos claves: te agarra, te agita y te deleita.