SANTIAGO.- Son de los grupos más interesantes que han salido de la escena local en la última década. Su particular y desprejuiciada mezcla de contenido profundo, hip-hop, jazz y dosis de humor negro, les ha dado el beneplácito del medio local como uno de los conjuntos más arriesgados a la hora de mostrar una propuesta.
La aventura que iniciara Cómo Asesinar a Felipes (CAF) con su álbum homónimo, publicado en 2008, ha sido la de una constante búsqueda de sonoridades. Así lo entiende y transmite el baterista del conjunto, Felipe Salas, quien entregó a Emol detalles de los nuevos caminos que sigue esta siempre inquieta agrupación nacional, y que los tienen ad portas de lanzar una suerte de compilado de su carrera, vía el renacido sello El Templo ReKords.
La relación entre CAF y su nueva casa discográfica se debió, más que nada, al azar que a otra cosa. "Recibimos el llamado de Jorge Campos y, en el fondo, yo tenía ganas y él también tenía los medios como para registrar algo, y a él le hacía mucho sentido que en el catálogo de El Templo, estuviera CAF", explica el baterista.
Para el grupo, colaborar con Jorge Campos no era una novedad. Ya habían compartido con él antes, en el Festival de Vanguardia celebrado la comuna de San Joaquín, en 2012. Por lo mismo, existe una cercanía entre lo que CAF apuesta por su música y lo que el bajista, reconocido por su labor en Fulano y Congreso, podía aportar a la banda. "Me gusta como él se acerca a la música. Desde, claro, el lado de vanguardia hasta la forma de hacer las cosas. Es muy de avanzar, de darle y nosotros tenemos un poco como la misma filosofía", detalla Salas.
-Ustedes vienen de hacer dos discos con el bajista de Faith No More, Billy Gould. Incluso uno de ellos, el V, lo grabaron junto a él en Estados Unidos. Ahora, trabajaron con Campos. ¿Cómo compararías ambas experiencias?
-Aunque no lo creas, se parecen porque ambos son súper respetuosos con la música. El trabajo que ellos hacen de producción no es meterse en nuestra música y decir "cambien esto" sino de siempre ir aportando y dar un punto de vista sin imponerlo. Por ejemplo, Jorge, al igual que el Billy, ellos eligen el estudio, quién nos graba, ellos mezclan la música, que al final también es un aporte creativo. O sea, en la mezcla, por ejemplo, el Billy o el Jorge pueden cambiar totalmente una canción también, pueden llevar las canciones a lugares inesperados. Entonces, como que por ahí va mucho su lado de producción.
Asimismo, Jorge Campos se contactó con la banda cuando en el núcleo de Cómo Asesinar a Felipes se estaban viviendo tiempos de cambio. La llegada del saxofonista Cristián Gallardo y la salida de Gabriel Paillao, pianista con quien registraron V (2014), tenían a un grupo que siempre ha buscado nuevas maneras de explorar su propio lenguaje, ante un reto no menor: reemplazar a un instrumento como el piano con el saxofón.
"Fue entretenido para nosotros ese proceso de cambio", reconoce el músico aunque admite que "no fue fácil al comienzo y varias veces yo la vi súper compleja de lograr, porque teníamos el desafío de igualar o superar las canciones antiguas, no podían quedar peores que las versiones originales. O sea, si estás haciendo una versión de un tema, tiene que ser mejor, si no, no lo hagas, entonces fue un desafío".
Justamente, con el nuevo saxofonista, la banda presentará una colección de lo que podría llamarse un "grandes éxitos" de CAF, pero bajo el prisma de esta nueva sonoridad de la banda. "De broma le llamamos 'Esas nuevas viejas canciones', jugamos harto con eso porque en el fondo, son canciones que algunas son del 2006, 2007 pero al hacerlas con saxo, suenan totalmente diferentes", revela el batero.
La inclusión de Gallardo, asimismo, obligó a CAF a plantearse de una forma completamente distinta con sus propias creaciones. "Nosotros tuvimos, cada uno de los otros músicos, que empezar a hacer otras cosas porque… es como los formatos de jazz, le llaman pianoless. En el fondo, el trío antes era con piano y ahora es batería, bajo y saxo, o sea, no hay ningún instrumento armónico, entonces el DJ, DJ Spacio, tuvo que empezar a hacer un poco el rol más armónico y claro, al comienzo fue difícil, si igual nos demoramos en rearmar todo esto", recuerda Salas.
-Siendo que la música de CAF no es académica per sé, si se notan los estudios detrás de las composiciones. Para este nuevo registro, ¿tuvieron que volver a la partitura, al papel, dado el nuevo integrante del grupo?
-Sí, o sea, claro. Gallardo, que es el saxofonista nuevo, él también viene de la parte académica. Salió de la Conchalí Big Band, él estudió desde chico ahí, entonces sí, nosotros estudiamos música pero lo usamos más que nada como una forma de comunicarnos. Tal como tú dices, nos gusta que no suene tan de escuela nuestra música. Nos gusta ese desorden, nos gusta esa suciedad, nos gusta esa búsqueda. Pero ahora que llegó Gallardo hay papel, partituras. De hecho yo aquí ando con los papeles, ando con mi agenda escribiendo todo, los cambios que vamos haciendo y vamos probando. Lo llevamos un poco al papel porque es como la forma que nosotros tenemos de comunicarnos y de entender un poco más lo que estamos haciendo.
Si bien el cambio es total, eso es algo que a CAF y a su baterista les motiva, en especial para el nuevo material que están preparando, en conjunto con este lanzamiento vía El Templo ReKords. "Es un sonido nuevo y te abre muchas puertas de composición. Escuchar temas con flauta traversa es una cuestión que nunca lo habíamos sentido como al componer, o el saxo, un saxo con efectos como lo usa Gallardo, también. Obviamente, como que te cierra otras puertas que tú puedes investigar pero te abre muchas", asegura el baterista.
Por lo pronto, el nuevo lanzamiento –aún sin título– que realizará CAF saldrá en septiembre, para en octubre participar en una nueva edición del festival VANG, que organiza El Templo ReKords. Y sobre su nuevo material, habrá que esperar un poco más. "Yo creo que lo vamos a grabar por ahí por octubre, pero para el próximo año saldría como disco", dice Felipe Salas.
