TORONTO.- Chris Pratt es uno de los actores que goza de mejor reputación en Hollywood. Pese a que ha protagonizado exitosas megaproducciones como "Guardianes de la Galaxia" o "Jurassic World: Mundo Jurásico", el estadounidense de 37 años es conocido por llevar un estilo de vida sencillo, y por tener muy buena disposición a la hora de conversar con sus admiradores.
En una conferencia de prensa en el Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF), el cineasta Antoine Fuqua— director de la nueva película del actor, "Los 7 magníficos"— recalcó que Pratt es uno de los "tipos más agradables" con los que ha trabajado. Lo mismo hizo Denzel Washington, su compañero de reparto en el filme que se estrenará el próximo 22 de septiembre. Ante esto, el actor posteriormente se refirió al tema.
"Para algunas personas no es importante que otros piensen que son unos idiotas. A algunas personas no les importa. A mí me suele importar si alguien piensa que soy un idiota", declara Pratt en una habitación del hotel Four Seasons de Toronto.
"Estaría desolado si alguien pensase que soy un idiota. Así es como me criaron. Siempre fue importante para mí", continuó. "En parte fue algo intuitivo porque cuando entré en este negocio como un joven, vi cómo cambiaba a la gente, cómo el dinero y el poder y la fama pueden transformar a buena personas en malas personas", explica.
"No estoy diciendo que no me va a pasar. Espero realmente que no me pase. Espero que pueda decir que todavía no me ha pasado. Es importante para mi tener los pies en el suelo, recordar de dónde vengo y ser una buena persona para otros", continua.
Para Pratt, la familia es especialmente importante. Atribuye a sus padres, junto a otras figuras de autoridad de su adolescencia, el quién es hoy. Y su refugio entre película y película es la familia que ha formado con su esposa, la actriz Anna Faris, y su hijo Jack, de cuatro años de edad.
Pratt ha definido a su padre, Dan Pratt, quien murió en 2014 de esclerosis múltiple y que trabajó primero como minero y posteriormente como capataz, como un "padre de la vieja escuela".
Su madre, Kathleen Louise, trabajó en un supermercado. Pratt creció en una pequeña comunidad del estado de Washington, trabajó vendiendo entradas y como "stripper", y durante un breve periodo vivió en Hawai sin tener una residencia fija.
"No puedo evitar ser quien soy y casi todo se lo debo a mis padres, que me educaron de la forma apropiada. Con disciplina. Haciendo que respetase la autoridad y a ellos", explica.
"Hay muchas cosas que me apasionan y me gusta hacer, incluso más que actuar. Esas cosas me mantienen con los pies en el suelo. Todo está relacionado con la naturaleza, ya sea cazando o pescando o caminatas por el bosque. Me encanta la naturaleza y amo a mi familia", reflexiona.
"Mi trabajo es algo que hago simplemente para financiar las cosas que me apasionan".
Precisamente la oferta de participar en "Los 7 magníficos" le llegó cuando estaba en un bosque, sin cobertura de teléfono, con un grupo de amigos cazando.
"Estaba escuchando uno de esos libros en audio, 'Lonesome Dove' de Larry McMurtry (una novela sobre el Oeste), y días después, cuando volví a tener cobertura, tenía una serie de mensajes, incluida una oferta para 'Los 7 magníficos'. Fue una señal", explicó.
Así que no lo pensó mucho, rechazó otras dos ofertas de trabajo que tenía sobre la mesa y se embarcó en su primera película del Oeste.
Uno de sus próximos trabajos es el rodaje de "Jurassic World 2" que será dirigida por el director español J. A. Bayona.