"Me dije que si la película no era exitosa vendría y llenaría los estantes", bromeó Benedict Cumberbatch.
Reuters
LOS ANGELES.- Todo indica que es un día normal, hasta que Benedict Cumberbatch ingresa en una tienda de historietas en Manhattan vestido de "Doctor Strange". Revisa algunos de los cómics en los estantes hasta convencerse y llegar al mostrador para pedir al encargado que lo contrate.
Parece una broma, pero realmente ocurrió, reveló este jueves el actor británico. Fue durante los últimos días de rodaje de la película "Doctor Strange", la décimocuarta producción del Universo Cinematográfico de Marvel, de Disney, y que este 3 de noviembre debuta en Chile.
El actor de 40 años se encontraba en la Quinta Avenida de Nueva York camino al Empire State cuando vio el local con el director Scott Derrickson y decidieron entrar. "No tenía dinero y ofrecí mis servicios. Me dije que si la película no era exitosa vendría y llenaría los estantes", bromeó Cumberbatch, quien interpreta al hechicero.
"Fue un momento mágico, muy especial, y como muchas cosas en esta película, no buscado", aseguró.
Derrickson también recordó el momento: "estaba completamente vestido [en el traje] y le digo 'deberíamos ir', y él: 'deberíamos, ¿no?'".
"Le dije 'Yo lo grabo, sólo seremos nosotros'. Así que entro con la cámara encendida y él se presenta y dice: 'Hey, estoy a punto de entrar a una tienda de comics' y yo lo seguí, la gente no lo podía creer, ¡era doctor Strange! Y se fue directo a las historietas de Doctor Strange", contó.
Filmada en Nepal, Nueva York, Londres y Hong Kong, Doctor Strange cuenta la historia del neurocirujano Stephen Strange, cuya vida cambia para siempre después de accidente de tránsito que lo deja inhabilitado del uso de las manos.
Sin encontrar cura en la medicina occidental, viaja a Katmandú a un centro de curación, que resultó estar en la primera línea del combate contra desconocidas fuerzas oscuras. El elenco incluye a Rachel McAdams, Benedict Wong, Mads Mikkelsen y Tilda Swinton.