Bertolucci junto a Brando y Schneider en el rodaje de "El último tango en París".
AP.
SANTIAGO.- "El último tango en París" marcó un antes y después en la vida de la actriz Maria Schneider. La protagonista del elogiado film de Bernardo Bertolucci saltó a la fama repentinamente gracias a aquella producción, pero a cambio de un alto costo personal.
El rodaje de una escena de sexo no concensuada en este filme— hecho que era público pero que recientemente la revista Variety sacó nuevamente a la palestra— generó un trauma en la fallecida actriz francesa, según ella misma contó en el año 2007.
La escena en cuestión corresponde a una violación anal perpetrada por el personaje interpretado por Marlon Brando. El ganador del Oscar dio vida en el filme a un viudo de 45 años que inicia una aventura sexual con una aspirante a actriz de 20 años. La cinta se centra en la poderosa atracción sexual que hay entre ambos, y a la violencia física y psicológica que ejerce él sobre su amante.
Schneider dijo durante una entrevista cedida al diario sensacionalista Daily Mail en 2007, que "El último tango en París" dañó su carrera y su vida personal, pues aquel papel la perfiló, a su pesar, como una figura sexual a inicios de la década del setenta. Asimismo, la llevó a ser víctima de una profunda humillación.
La artista no volvió a rodar desnudos y tras el impacto que sufrió su vida con este filme, cayó en una depresión que derivó en intentos de suicidio y adicción a las drogas.
La hija de la modelo Marie-Christine Schneider dijo a Daily Mail que la escena de la violación anal se sintió como un verdadero abuso en su contra, pues la secuencia no estaba en el guión y sólo se le notificó antes de iniciar la grabación. Pero en aquel entonces no supo cómo lidiar con el hecho.
"Sólo me avisaron al momento de rodar la escena, y me sentí muy enojada. Debí llamar a mi agente o a mi abogado para que fuera al set, porque no puedes forzar a alguien a hacer algo que no está en el guión, pero en ese momento eso yo no lo sabía", dijo la actriz fallecida en 2011.
"Me sentí humillada, y para ser honesta, me sentí violada, por Marlon y Bertolucci"
María Schneider
"Marlon me dijo: 'Maria, no te preocupes, es sólo una película'. Pero durante la escena, aún cuando Marlon no estaba haciéndolo de verdad, lloré de verdad. Me sentí humillada, y para ser honesta, me sentí violada, por Marlon y Bertolucci. Después de la escena, Marlon no me consoló ni me pidió disculpas. Afortunadamente fue sólo una toma", explicó.
Este abuso obviamente influyó en el modo en que Schneider percibía a Bertolucci, a quien no consideró el cineasta brillante que la crítica suele aclamar.
"Creo que Bertolucci está sobrevalorado, y después de 'El último tango' no hizo nada con el mismo impacto", aseguró.