"La música es un lugar legítimo desde el que protestar, los músicos tienen el derecho absoluto, el deber, de abrir la boca y hablar claro", dijo Roger Waters.
Reuters.
LONDRES.- El músico británico Roger Waters se sumó al amplio frente de opositores al gobierno de Donald Trump. El fundador de Pink Floyd contó que para demostrar su descontento, está dispuesto a llevar el espectáculo musical "The Wall" a la frontera entre Estados Unidos y México.
El bajista y compositor protagonizó una rara aparición junto al baterista de la legendaria banda británica, Nick Mason, en el marco de una exposición que el Museo Victoria and Albert de Londres les dedicará a partir de mayo.
"Es muy relevante ahora con Trump y todo lo que habla de muros, creando toda la animosidad posible entre razas y religiones", dijo Waters aludiendo a The Wall, disco aparecido en 1979, en plena Guerra Fría, y que dio paso a un concierto-espectáculo que Waters llevó al muro de Berlín.
Waters dijo que estaba "absolutamente" preparado para llevar el gran concierto a la frontera norteamericana, pero que "hace falta un periodo de concienciación (...) para que algo así ocurra".
En concreto, el compositor y músico de 73 años reclamó que sus colegas músicos se planten ante "la extrema derecha (...), que alza su cabeza monstruosa alrededor del mundo".
"La música es un lugar legítimo desde el que protestar, los músicos tienen el derecho absoluto, el deber, de abrir la boca y hablar claro", sentenció.
Waters auguró "las mayores manifestaciones que se han visto en Londres" si Trump visita finalmente el país este año, atendiendo la invitación que le cursó el gobierno de Theresa May.