Johnny Depp vuelve a interpretar al Capitán Jack Sparrow.
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SANTIAGO.- 14 años han pasado desde que Jack Sparrow, interpretado por el camaleónico Johnny Depp, llegó a los cines con "Piratas del Caribe: La maldición del Perla Negra". Con una historia rápida y entretenida, las aventuras de un grupo de corsarios en búsqueda de un tesoro maldito rápidamente se convirtió en un éxito de taquilla y, por consiguiente, dio paso a varias secuelas.
La segunda y tercera entrega de la franquicia producida por Disney y Jerry Bruckheimer también fueron vistas con buenos ojos por la audiencia y los expertos, pero la cuarta película terminó por alejarse completamente de su esencia. Esto, debido a que las hilarantes aventuras de los piratas quedaron en segundo plano ante la incorporación de elementos mitológicos, como la fuente de la juventud y las sirenas; lo que llevó a "Piratas del Caribe" a continuar siendo un éxito en los cines, pero con un argumento mucho más débil, e incluso a ratos aburrido.
Es por eso que cuando Disney anunció una nueva película, "La venganza de Salazar", las expectativas eran bajas y la gran duda era cómo el estudio lograría retomar las raíces de la cinta original. Para ello, apostó por los directores noruegos Joachim Rønning y Espen Sandberg (nominados al Oscar por la película "Kon-Tiki" en 2013), quienes tenían como meta refrescar la saga y sentar las bases para otras dos entregas (ojo con las escenas post-créditos).
Para encaminar el objetivo, la cinta apostó por fichar a nuevos personajes que evocan el espíritu aventurero de Will Turner (Orlando Bloom) y Elizabeth Swann (Keira Knightley)—el heróico dúo que trabajó con Sparrow para combatir al Capitán Héctor Barbossa (Geoffrey Rush) y que desapareció en la cuarta producción—. Los actores reclutados para asumir la misión fueron Brenton Thwaites (Henry Turner) y Kaya Scodelario (Carina Smyth).
Tal como lo dice su nombre, en "La venganza de Salazar" el Capitán Salazar (Javier Bardem) irá en búsqueda de Jack Sparrow, quien fue el responsable de su desgracia y maldición, luego de que lo encerrara junto a su tripulación en el Triángulo de las Bermudas. En esta nueva aventura, Sparrow deberá unirse al hijo de Will Turner y Elizabeth Swann, Henry, quien busca liberar a su padre de su condena como capitán del Holandés Errante; y de Carina Smyth, una joven astrónoma capaz de interpretar "el mapa que ningún hombre puede leer" y que los llevará al Tridente de Poseidón.
La interpretación de Depp como Sparrow sigue siendo la misma, con los mismos toques de extravagancia y humor. Mientras que Thwaites le da el toque ingenuo a la cinta, haciendo recordar al joven Will Turner que intervino en la primera entrega. Por su parte, Bardem se luce como un excelente y aterrador villano, que hace lo imposible por cumplir con su objetivo. Además, Scodelario trae de regreso a la heroína que tras la salida de Knightley de la franquicia, esa que Penélope Cruz en "Navegando en aguas misteriosas" no logró suplir.
La película cuenta además con el cameo de antiguos personajes —tal como se supo, Bloom vuelve a tomar su papel de Will Turner—. Sin embargo, entre ellos destaca el de Paul McCartney. El ex Beatle, al igual que Keith Richards, sorprende al aparecer por algunos minutos. Si bien su intervención es graciosa, no resulta fundamental.
Aunque a ratos "La venganza de Salazar" es lenta e incluye un exceso de batallas (claramente pudieron ser más cortas), la película logra retomar la esencia de "Piratas del Caribe". Es decir, mezcla una alta dosis de humor con aventuras difíciles de predecir, siempre con efectos especiales de primer nivel. Sin embargo, se encuentra lejos de estar a la altura de la película original.
"Piratas del Caribe: La venganza de Salazar" se estrena este jueves 25 de mayo en los cines nacionales.
