El cantante fue jurado en la última versión del Festival de Viña donde también tocó sus temas más populares.
Rubén García, El Mercurio.
SANTIAGO.- Por casi exactamente dos horas Maluma hizo bailar y desató la euforia en el Movistar Arena en el primero de sus tres conciertos en el marco de su gira "Pretty Boy, Dirty Boy World Tour" que lo tiene por tercera vez en Chile.
Así a las 21:17 horas se apagaron las luces para anunciar que el reguetonero pronto pisaría el escenario, lo que no ocurrió hasta 10 minutos después tras una larga introducción que generó la incertidumbre de los asistentes, que esta vez no llenaron el recinto ya que no se vendieron la totalidad de las entradas, las que sólo están agotadas para su tercera fecha agendada para este viernes.
Ya una vez iniciado el concierto que incluyó sus éxitos como "Borró Cassette" "Sin contrato" y algunos de sus duetos que fueron acompañados por el coro como "Chantaje" (Shakira) y "Desde esa noche" (Thalía), el colombiano intentó revertir lo que fueran las máximas críticas tras su última presentación en tierras nacionales, cuando fue duramente cuestionado por el excesivo uso de playblack y falta de calidad vocal en su paso por el Festival de Viña del Mar.
Así en un concierto que fue de menos a más, ya que al comienzo recurrió a un alto apoyo de sus coristas y de bases musicales, e incluso hubo un pequeño corte de audio, luego entonó varias de sus canciones a capela demostrando que sí es capaz de cantar y rapear tal como lo hacen los referentes de su género. Todo esto rodeado solo de un Dj, dos coristas, un guitarrista, un baterista y seis bailarinas.
Con constantes coqueteos con sus fanáticas —en su mayoría adolescentes— que no se cansaron de reconocer sus atributos físicos, las sorprendió al aparecer en medio del concierto al final del palco para cantar dos de sus temas, "La invitación" y "Vuelo hacia el olvido", solo acompañado por su guitarra e invitando a una mujer del público para dedicarle lo que llamó "una especial serenata".
Juan Luis Londoño Arias (su nombre real) volvió a enloquecer a quienes lo fueron a ver al presentar sobre el escenario a sus compatriotas de Piso 21, quienes lo acompañaron cantando "Me llamas" e incluso los dejó solos frente al público entonando "Besándote".
En un show cargado de pirotecnia, confeti y variados juegos de luces, Maluma interactúo constantemente con sus fanáticos que "perrearon" todas sus canciones. Además realizó varias reseñas a lo importante que es para él Chile, lo que quedó en evidencia cuando cerró el espectáculo vistiendo -tras dos cambios de ropa- la camiseta número 10 de la selección nacional de fútbol.
Al ritmo del hit de su último disco X (2017), "Felices los cuatro" que consideró arreglos de salsa y ante la solicitud e insistencia del público para que cantara la polémica canción "Cuatro babys", el artista de 23 años se despidió esta noche de sus fans en el marco de una gira que lo llevará luego hasta Argentina, Uruguay y España, entre otros.