Director de "It" y el trasfondo del libro de Stephen King: "Tiene que ver con los miedos de crecer"

SANTIAGO.- Para el cineasta Andrés Muschietti ("Mamá") la figura de Pennywise tiene dos interpretaciones claras en el libro de Stephen King "It" (1986). Más allá de encarnar los miedos de a quienes se les manifiesta, el director argentino rescata una cualidad a la que el mismo payaso hace alusión en la novela: que es "el devorador de mundos" (the eater of worlds, en inglés).

- Mi primer contacto fue con el guión de Fukunaga. Cuando salió esta oportunidad, lo primero que pensé fue recurrir a mi experiencia emocional, leyendo el libro cuando tenía 14 años y trasladarlo a una película que me gustara como adulto. Entonces, fue un proceso como de recuperar ese espíritu, pero fue un proceso personal. A cada uno el libro le pega de una manera distinta. Cuando leí el guión, para mí era obvio que habían muchas cosas que cambiar. Llegué al estudio un día, me tomó una semana para hacer una presentación y hacer un pitch de la película y salió bien, la compraron y ahí fue cuando empezó todo.

- Obviamente hay temas muy adultos. El approach con los chicos fue de mucho cuidado y delicadeza. Hablamos mucho de los personajes. Para mí era importante que ellos entendieran a fondo qué es lo que le está pasando a cada uno de ellos. Por otro lado, los chicos de esta generación están familiarizados con temas adultos, mucho más que cuando yo era niño. Entonces, es un poco distinto. Ellos ya están familiarizados con películas de terror, así que el trabajo fue muy cuidadoso. También los padres participaron del asunto (...) Mi primer instinto, cuando hice el casting, era encontrar actores que tuvieran el ADN de los personajes, no quería forzar ninguna situación, ninguna interpretación, quería que los actores tuvieran las personalidades de los personajes, fue duro y largo, pero lo conseguimos.

- El terror de Pennywise tiene que ver con los miedos de crecer, pero no sólo eso, es el terror a la muerte, a la muerte de la infancia. La infancia es una etapa que cuando la dejas atrás, dejas atrás un mundo de imaginación y de fe en cosas que necesariamente no existen, es un mundo de magia. Entonces, la muerte de esa magia es un poco para mí lo que trata de reflejar Stephen King con esta historia. En el libro, en un momento, Pennywise se describe a sí mismo 'the eater of worlds', el 'comedor de mundos' y para mí siempre lo que eso significó no es que se esté comiendo mundos reales, no son planetas, es un comedor de mundos de imaginación, un comedor de fe, y eso es lo que pasa cuando la infancia muere, cuando uno la deja. Y no es casualidad que los adultos en esta historia es gente que es incapaz de ver la cosas, de darse cuenta lo que pasa, e incapaz de tener la imaginación suficiente como para entender ciertas cosas. Básicamente, es eso.

Después hay otra interpretación, que me parece muy relevante en los tiempos que vivimos, en donde los terrores vienen de todo tipo de ángulos. En el libro el payaso se reencarna en tu peor miedo y a mí me gusta compararlo con la cultura de miedo que vivimos. Ese miedo es una herramienta, no sólo es un instinto o un mecanismo de sobrevivencia, sino que el miedo es una herramienta para controlar a los pueblos y vienen de la mano de gobiernos, corporaciones, los medios, religiones. Entonces, creo que también es una reflexión sobre el poder del miedo como herramienta para subyugar a los pueblos y a la gente.

- Siempre hay gente de todo tipo. Las nuevas generaciones se están enfrentando ahora a una situación donde el miedo es utilizado como herramienta desde el poder. Entonces, me parece que es un mensaje relevante para las nuevas generaciones. ¿Que las generaciones viejas que leyeron el libro lo entiendan mejor? Puede ser, o tengan una lectura más clara del asunto. Pero, sí, me parece que es un mensaje para todos.