SANTIAGO.- "Llevo diez años viéndome jodidamente glamurosa. Es aburrido", comenta
Lady Gaga a su equipo, a las orillas de la piscina de su casa en Nueva York. En seguida se saca la parte de arriba del traje de baño y continúa la reunión en
topless, "lo siento, simplemente se siente mejor", se excusa.
"Gaga: Five Foot Two", documental dirigido por Chris Moukarbel y producido y estrenado por Netflix, muestra la metamorfosis que la artista desarrolla en esta nueva etapa de su carrera, en la que busca despojarse de la imagen glamurosa y grotesca que la hizo saltar a la fama. Este filme es fiel reflejo de la intención que tiene la artista en sus recién comenzados 30 años: depurar su estética y su música.
Gaga— apodo que usa tanto en lo personal como en lo profesional —, se muestra en la totalidad de la cinta con la cara lavada, con ropa de casa, alimentando a sus perros, asistiendo a algún bautizo o visitando de improviso a su abuela. Seguramente, era lo que todos querían ver cuando salió vestida con un atuendo hecho de carne en los premios MTV 2010, o en cada presentación de vestuarios exuberantes que reveló durante aquellos primeros años de su carrera; en la que a cada aparición generaba en todos la pregunta: ¿Quién diablos es la persona que está detrás de todo ese disfraz?.
En ese entonces hubiese sido interesante, hasta impactante, ver a la persona de carne y hueso detrás de tanto brillo. Sin embargo, a un año de que presentara su último disco Joanne (2016) y su nueva estética depurada, la urgencia por conocerla parece haberse esfumado.
La ocasión que trae de vuelta la necesidad de conocer a Gaga, tal vez sea el décimo aniversario de su carrera, el que corona con una histórica presentación en el entretiempo del Super Bowl (evento que lleva el hilo conductor del filme de principio a fin). Detrás de esta cantante indiscutiblemente exitosa, se esconde una persona solitaria, ansiosa y cansada. "Cada vez que anochece estoy completamente sola, después de toda la gente que me toca y me habla durante el día, estoy sola", dice entre lágrimas en uno de los momentos más emotivos de "Gaga: Five Foot Two".
Gaga se enfrenta al intenso dolor corporal provocado por la fibriomialgia, en otra escena turbadora. Vemos como se retuerce sobre un sillón mientras dos personas le masajean la cabeza y los pies. Entonces la artista reflexiona en torno a que su vida sería insufrible de no tener a su disposición el dinero y las personas que la ayudan. "Luzco patética", se lamenta llorando.
El personaje está inmerso en una introspección permanente durante toda la cinta. En uno de los pocos momentos en los que sale de ella, habla acerca de Madonna. Lady Gaga fue vinculada a la reina del pop desde los inicios de su carrera musical, incluso muchos la señalaban como heredera de su obra; hasta que Madonna se desligó de Gaga, tildando su trabajo de "reductivo" (simplista o imperfecto), durante una entrevista en 2012.
A pesar de lo odioso de las comparaciones, en este punto el paralelo entre Madonna y Gaga parece clarificador. Madonna desafió cada convención de su época, convirtiéndose en un ícono del feminismo, de la diversidad sexual, de la moda y de la música. El ímpetu inicial de Gaga, teñido de un rupturismo fascinante, parecía apuntar a lo mismo. Sin embargo, la revolución que libra ella, y que se documenta en "Five Foot Two", parece tener un alcance muy reducido. Su lucha y su dolor son individuales, íntimos, y no parecen aspirar a mayor alcance que el de su propio ser.
"Algunos de mis fans van a estar decepcionados por mi atuendo", dice Gaga durante la cinta, cuando comienza a vestir en sus shows unos simples short de jeans y camisetas. Se hace un breve contraste con el impacto que causaban sus anteriores looks, y en este punto, Moukarbel pudo haber insistido más. Si bien en un momento Gaga explica que no se sentía lista para mostrarse como realmente era, y que por eso recurría a este tipo de mecanismos para llamar la atención, —"nunca me sentí lo suficientemente linda o lo suficientemente talentosa, hasta ahora", dice— hubiese sido importante repasar sus inicios para construir una visión más completa de la artista.
En resumen, "Gaga: Five Foot Two" muestra la purga de Gaga por renacer, y presenta a una artista realmente talentosa a través de sus ensayos y presentaciones, pero faltan momentos de impacto cinematográfico que ayuden a comprender el porqué hay que documentar la transfiguración de esta artista, cuál es la marca que ella espera dejar en la sociedad en la que está inmersa, más allá de su propio ombligo.