SANTIAGO.- "Princesita", el segundo y nuevo largometraje en la carrera de la directora Marialy Rivas, es descrito por su realizadora como un cuento de hadas, de esos que hicieron famosos a los hermanos Grimm por "una crueldad y oscuridad terribles", que a lo largo de la historia fueron mutando como relatos alegres y no como narraciones con orígenes más bien tétricos.
Y para armar la nueva historia que el 19 de octubre llegará a la pantalla grande, Rivas y Camila Gutiérrez —dupla responsable de la cinta "Joven y alocada" (2012)—, quisieron volver a las raíces de esos cuentos "infantiles", desblanqueando las tramas donde la princesa buscar ser salvada por un príncipe azul, revisitando así la génesis de estas historias más angustiantes.
Una niña de 12 años llamada Tamara (Sara Caballero) pasa sus días moviéndose en un paisaje de ensueño en lo que perfectamente podría ser el paraíso. Sin una figura materna, la menor queda bajo la protección y el cuidado del carismático líder de un culto, Miguel (Marcelo Alonso), quien procura vivir en absoluta armonía con ella y el resto de integrantes de la comunidad.
La conexión entre ellos se irá desvaneciendo cuando él le encomiende la misión de engendrar un hijo juntos, quien será un "salvador" de la humanidad. El hecho, naturalmente, desconcierta a Tamara, quien intentará sortear los sinsabores de su paso de niña a mujer con miedo, violencia y frustración.
Rivas revela a Emol que un caso acontecido en el sur de Chile fue la idea gestora del guión de la nueva cinta. "En 2012 leí una noticia de un culto religioso compuesto por puros hombres. Su líder tenía una hija y él sostenía que la niña iba a traer al "salvador" que iba a impedir que se acabara el mundo. Ese es el punto de partida, pero lo que a mí me llamó la atención es cómo estos hombres no tenían ni una conciencia de los deseos que podía tener esta niña", dice.
Rodada en Puerto Varas, el filme producido por
Fábula —la productora capitaneada por los
hermanos Pablo y Juan de Dios Larraín— aborda, además del funcionamiento de una secta religiosa, el abuso del que son víctimas menores de edad que en el caso de las niñas, son tipificadas como vehículos para traer a otros niños al mundo contra su voluntad.
Marialy sostiene, en este punto, que la pedofilia en "Princesita" "es un tema. Es lo que hay en el centro. Por supuesto que, además, refleja a un Chile que no cuida a sus niños. Un Chile donde el embarazo adolescente también es producido por el abuso sexual, donde ninguna niña quiere ni debe estar ahí".
Y suma: "Al mismo tiempo con todo lo que ocurre en el Sename, donde todos hemos descubierto horrorizados que han matado y violado niños, eso es culpa de todos. Es culpa de un país que rasga vestiduras con una mínima ley de aborto que es, básicamente, un derecho humano. Sin embargo, en la práctica real no se preocupa de los niños".
Con esta nueva entrega, Rivas espera que "Princesita" "ponga el tema sobre la mesa, porque cuando las cosas son tan tremendas uno no las quiere mirar. Cuesta. Para mí fue muy difícil hacer la película, desarrollarla. Tuve la suerte de que pude hacerla y aún así fue muy devastador. Entonces, si uno trata de pensar en la cantidad de niñas que viven eso —y que es un tema que no se habla porque los abusos también ocurren al interior de la casa y por personas conocidas—, pucha, mientras más se hable y mientras menos tabú sea, más vamos a proteger a nuestros niños".
El cine como generador de empatía
Marialy Rivas estrenó "Princesita" en la reciente edición del
Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF), donde se presentó en la
sección Discovery. Posterior a este certamen, el filme también se exhibió en el
Festival de Cine de San Sebastián, donde fue una de las 13 películas que compitió en la categoría de
Nuevos Directores.
En dicha instancia también arribaron "Una mujer fantástica", de Sebastián Lelio y "Los perros", dirigida por Marcela Said, producción que fue galardonada con el premio Horizontes Latinos en la sexagésima quinta versión del evento vasco.
Las tres cintas abordan la mirada femenina de sus protagonistas, siendo la entrega protagonizada por Daniela Vega, la que representará a Chile en los próximos premios Oscar en la categoría de Mejor película de no habla inglesa.
Pese a esta explosión de historias llevadas al cine, donde son las mujeres las que hablan de sus logros y fracasos, Rivas asegura con convicción que, pese a que la industria cinematográfica le ha dado más espacio a tocar temas femeninos, "a la narrativa mundial aún le falta poner más historias femeninas en pantalla. Es algo que no sólo lo digo yo. ¿Qué es lo que pasa? Es que el cine es generador de empatía y cuando tú solo pones historias de un solo tipo de persona, en este caso hombres heterosexuales y blancos, la empatía de la sociedad es sólo a esos personajes".
"Princesita" busca indagar en la mirada de una menor inocente que, a sabiendas de que su cuerpo está cambiando, no quiere efectuar lo mismo con su comportamiento de una manera drástica. Persigue, también, descifrar el pensamiento femenino a temprana edad.
"Somos la mayoría de la población, pero somos la única mayoría tratada como minoría y me pasó que con esta misma película donde las mujeres que la han visto entienden inmediatamente el lado metafórico del relato de la identidad femenina".
Y recuerda una anécdota en San Sebastián: "Con los periodistas hombres, si bien les gustó mucho la película, como no tienen una experiencia cercana, era una lectura que yo sentía que tenía más o menos que guiar. En eso me asombré mucho, porque dije que eran hombres brillantes y sensibles que les gustó lo que mostré, pero también es lógico que no lo entiendan porque no están acostumbrados socialmente a empatizar con la experiencia femenina".
"Entonces creo que es muy importante contar historias de mujeres, idealmente ellas mismas o como lo hace Lelio que tiene gran generosidad, que pone a la Daniela Vega en el centro y todo a través de su película donde aprendemos de la transexualidad. No es sólo que las mujeres debemos contar nuestras historias, también se puede ser solidario poniéndonos como tema central", cierra.