SANTIAGO.- Que evadió el problema o que fue oportunista. Los comentarios que resultaron de la declaración de
Kevin Spacey ("Belleza americana") —quien reveló su homosexualidad en medio de una acusación por acoso sexual a un menor—, han sido duras de parte de figuras y entidades públicas relacionadas al espectáculo y al activismo LGBT.
Uno de ellos fue la presidente y directora ejecutiva de
GLAAD (Alianza Gay y Lésbica Contra la Difamación). "Las historias de revelaciones no deberían usarse para desviar las acusaciones de agresión sexual", aseguró en un comunicado.
"Esta no es una historia sobre 'salir del clóset' de Kevin Spacey, sino una de sobrevivencia de Anthony Rapp y todos aquellos que hablan valientemente en contra de las agresiones sexuales no consensuadas. Los medios y el público no deberían pasar por alto eso", añadió.
Asimismo, los #ComentaristasEmol también manifestaron sus posturas respecto al tema. "La comunidad gay ha efectuado un gran esfuerzo para evitar ser comparados con pedófilos ante comparaciones retrógradas de ciertos sectores; por ende, bien feo utilizar una cortina de humo mediática para ocultar una GRAVE acusación de pedofilia. Kevin Spacey será un excelente profesional, pero como persona ahora deja mucho que desear, y para peor, apostaría que con esto su carrera se termina", escribió Tomás Biggs.
La Comunidad Gay ha efectuado un gran esfuerzo para evitar ser comparados con pedófilos ante comparaciones retrógradas de ciertos sectores; por ende, bien feo utilizar una cortina de humo mediática para ocultar una GRAVE acusación de pedofilia. Kevin Spacy será un excelente profesional, pero como persona ahora deja mucho que desear, y para peor, apostaría que con esto su carrera se termina.
Además, en Emol conversamos con expertos que analizaron las declaraciones de Spacey.
Ana Josefa Silva, comentarista de Espectáculos y crítica de cine: "Evidentemente hay un publicista inteligente detrás"
"Una tiende a pensar de que hay un buen equipo comunicacional detrás. También puede ser que se le haya ocurrido solo. Me parece que está bien elaborado, casi como la respuesta de Marylin Monroe de con qué duerme, que con Chanel N° 5. Eso evidentemente es que hay un publicista inteligente detrás. Además, él está curiosamente en el peak de su carrera a través de lo que es la serie de TV, que es el rey de las producciones audiovisuales en este momento y con Netflix que es el que está puntero. Está en ese momento que es bien clave. No necesariamente lo va a dañar, porque está muy bien posicionado y tiene su cumbre. Pero no sale bonito decir ‘no me acuerdo’, no me suena bien.
En el fondo él, y yo creo que es un daño colateral no calculado, finalmente está ligando el tema del abuso sexual con lo que es LGBT, que no tiene nada que ver. Los abusadores sexuales son de cualquier índole. Al hacer esto, al parecer una buena salida del lío, por cierto que a la pasada les pega una rociada al movimiento, porque asocia, no directamente, el abuso con el hecho de ser gay".
Constanza Michelson, psicóloga y autora del libro "Neurótic@s": "Decir que esto tiene que ver con la homosexualidad antes que con un abuso, eso es malentender las cosas"
"La verdad es que mi impresión de que sí efectivamente podría ser una estrategia comunicacional y digamos que es media canalla en este sentido, porque decir que esto tiene que ver con la homosexualidad antes que con un abuso, eso es malentender las cosas, suponiendo que los abusos solamente tienen que ver con lo heterosexual. La lógica de lo abusivo tiene que ver con el cruce de lo sexual con un abuso de poder, independiente de la orientación sexual de quien la ejerce. En ese sentido si hay un menor de edad, uno podría decir que con un adulto hay una relación inevitable de poder.
Lo que mezcla ahí de alguna forma. Él está justificando una lógica abusiva a propósito de una orientación sexual, como si la explicación fuera su orientación sexual y una cosa no tiene que ver con la otra".
Diego Poblete, director ejecutivo de la fundación Todo Mejora: "Si uno pide disculpas al aire, no tiene peso"
"Lamentamos que una vez más se vincule un hecho de agresión hacia menores con él ser una persona gay. Nos parece irresponsable. Pero lo que a mí más me llama la atención es un tema de derechos humanos: para que exista el perdón es necesario que exista el reconocimiento de la falta y de la víctima. Si uno pide disculpas al aire, no tiene peso".