Leonor Varela en marzo de 2017.
La Segunda
SANTIAGO.- Desde que se destapó el escándalo de
Harvey Weinstein varias estrellas de Hollywood han tenido que cargar con acusaciones de abuso y acoso sexual. Kevin Spacey y James Franco son algunos de los casos más llamativos de estos incidentes en la industria fílmica estadounidense; escándalos que hasta el momento no habían llegado a conectarse directamente con las celebridades chilenas. Eso hasta hoy, que
La Segunda publica una entrevista en que
Leonor Varela revela un
episodio de acoso sexual del que fue víctima en Hollywood.
"Yo creo que a todas nos ha tocado", dice la actriz que internacionalizó su carrera con la película "Cleopatra", en 1999. "Estoy viendo la mejor manera de verbalizar y contar mi experiencia. Pero sin duda tuve mucha suerte. Tengo la suerte de ser súper fuerte y de no dejarme tratar como objeto".
La actriz dice que se identificó con Natalie Portman por la frase que dijo en la última marcha por la causa feminista en Hollywood: "adapté mi conducta a un terrorismo sexual". "Yo hice algo muy similar", dice Varela. "Cuando yo sentí la energía del depredador, me tapé. Mis primeros papeles después de "Cleopatra" fueron cosas que hice para afearme. Cuando Playboy me ofreció un montón de plata para tenerme en su portada yo les dije que no. Todo lo que me llevaba a ser objeto sexual para mi era algo negativo. Escogí no exponerme a estas situaciones, y aún así tuve experiencias muy violentas".
Al ser consultada acerca de cómo reaccionó ante el ataque, Varela responde: "Tuve que agacharme y salir corriendo. Literalmente, porque se te echan encima y tienes que correr a la puerta y salir del lugar". "Mi objetivo es que esta persona sea expuesta, y estoy buscando la mejor manera, que es la más eficiente de exponerla, porque se encuentra fuera de EE.UU. en este momento", agrega.
Además, Varela dice haber vivido en carne propia parte de los abusos de Weinstein. "Cuando llegué a EE.UU. con "Cleopatra" yo estaba en un póster sensual en todas las paradas y sé que Weinstein tomó el teléfono y llamó a mi agente. Me dieron cuatro películas solamente por verme en ese póster, sin conocerme. Yo hice una película con ellos, un western, pero nunca me sentí cómoda jugando ese juego. Cuando habían cenas, yo no iba. ¿Y cuál es el precio que pagué por eso? Nunca más me volvieron a contratar. Tenía un contrato por cuatro películas e hice una", explica.
