Se dice que Hitchcock descubrió a su musa Tippi Hedren en un comercial de televisión, después de verla, le prometió convertirla en una estrella. De esta forma es que la actriz aceptó interpretar a Melanie Daniels en "Los pájaros" (1963), lo que sin duda le traería fama pero también malos ratos. Hitchcock estaba fascinado con ella y contrató un equipo para que la siguiera y así estar al tanto sobre la vida de la protagonista de su película.
En el rodaje de la cinta, para la que habían dispuesto de pájaros mecánicos, el cineasta insistió en utilizar plumíferos reales. La escena del ático tomó una semana en rodarse, días en los que el director buscó capturar el horror de Hedren al ser atacada por pájaros reales. La actriz sufrió un picotazo en el ojo que le provocó un derrame de retina.
"El último tango en París" (1972) impactó por la fuerte escena de violación que interpretaban Marlon Brando y Maria Schneider. La actriz aseguró que el acto no aparecía en el guión y le tomó por sorpresa. El argumento del cineasta era provocar "humillación e ira" que le dieran realismo a la toma. Schneider, quien entonces tenía 19 años, declaró en 2007: "Me sentí violada tanto por Marlon como por Bertolucci". El director contestó sentirse culpable, pero no arrepentido.
"El Resplandor" (1980) es sin duda la obra maestra de Stanley Kubrick, sin embargo, los métodos que utilizó para lograr el resultado son cuestionables. Shelley Alexis Duvall, protagonista de la película, reveló que el cineasta fue cruel con ella durante todo el rodaje y que la torturaba psicológicamente para lograr el estado de vulnerabilidad que necesitaba para que fuera creíble el sufrimiento del personaje "Wendy".
Entre los cinéfilos se conoce el dato de que la escena del baño en que Jack intenta matar a Wendy, fue repetida más de 127 veces. Años más tarde, su coprotagonista Jack Nicholson contó que a la actriz se le caía el pelo por estrés. A causa de la presión a la que se vio sometida, Duvall necesitó ayuda psiquiátrica.
"Bailarina en la oscuridad" (2000) fue la primera y última colaboración entre la cantante Björk y Lars von Trier. ¿La razón? El cineasta danés también utilizaba el método de presión psicológica para lograr realismo en el personaje de "Selma", por el cual Björk ganó la Palma de Oro a Mejor actriz en el festival de Cannes aquel año. Tras el estreno de la película se filtraron detalles del complejo rodaje, durante el cual la artista sufrió un ataque de ira contra von Trier, rompió el vestuario que llevaba puesto y corrió por las calles de Copenhague, ciudad en la que estuvo desaparecida durante cuatro días. Hace poco, con el impulso del escándalo de Harvey Weinstein, Björk reveló que el cineasta trató de abusar sexualmente de ella y que los malos tratos fueron a causa de su rechazo hacia él. "Me di cuenta de que es universal que un director pueda tocar y acosar a sus actrices y la industria lo permite", dijo la cantante.
"La vida de Adele" fue uno de los estrenos más importantes de 2013. La cinta, que trata sobre una joven que experimenta sexualmente con mujeres ante el prejuicio de sus familiares, ganó la Palma de Oro a Mejor película en Cannes y figuró como nominada en los Globo de Oro y en los Bafta. Desde la comunidad LGTBI, sin embargo, tuvo opiniones divididas puesto que algunos consideraron que el director abusó de las escenas sexuales. Así también lo afirman las actrices, quienes aseguraron que el director las presionaba a hacer escenas eróticas demasiado largas cuyo rodaje se había convertido "en un infierno"; que les pedía a gritos que se pegaran y las humillaba. Por su trato autoritario y violento, Seydoux y Exarchopoulos afirmaron que era un gran director pero que no volverían a trabajar con él.