La argentina Luciana Salazar realizó el tradicional "piscinazo" como reina del Festival de Viña del Mar de 2005.
Cristián Carvallo, El Mercurio (archivo)
SANTIAGO.- La explotación del cuerpo femenino también se ha tomado el debate previo a una nueva realización del Festival de Viña del Mar, que este año se realizará entre el 20 y 25 de febrero.
Ello, porque uno de los eventos anexos más populares del certamen musical gira justamente en torno al cuerpo de la mujer, con el denominado "piscinazo" de la reina del Festival.
La tradición implica que quien es elegida para llevar dicho cetro debe darse un chapuzón ligera de ropa, para mostrar que no sólo fue elegida por su empatía y capacidad intelectual.
Sin embargo, este año será distinto. Así lo confirmó Sergio Maraboli, director de la Cuarta, medio que organiza el concurso, quien anticipó que justamente por el rechazo mediático que genera la cosificación del cuerpo fenemino, el piscinazo 2018 será "más recatado". Y que no sólo se elegirá reina, también habrá un rey.
"Lo primero es que la gente sepa que, después de 40 años, ahora tendremos un rey y una reina, por lo tanto ahora la elección es de los reyes de Viña", señaló Maraboli a "Biut".
"Este año el piscinazo será más recatado", agregó, explicando que esto responde "al perfil de nuestra nueva Cuarta, que también se adapta a los tiempos como se han ido adaptando todos los chilenos".
Para frenar el destape, indicó que "conversamos con los equipos de cada canal y ellos se manifestaron contentos y a favor de esto".
Y sobre el piscinazo, Maraboli adelantó que este año "Rey y reina se lanzarán juntos, lo que no quiere decir que ambos serán de un mismo canal, ya que pueden ser de equipos aparte".
Durante 2017, La Cuarta también eliminó de sus páginas la sección "Bomba 4", donde mujeres se mostraban desnudas para los lectores.
Las críticas negativas no son compartidas por todos. El diputado electo, Andrés Celis, que suele involucrarse en estos eventos festivaleros, es uno de ellos.
"El piscinazo como parte de las actividades que realiza la prensa en torno al Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, en mi opinión en nada daña a las mujeres física, psicológica o sexualmente y menos coarta su libertad", señaló ante las consultas sobre la similitud que tendría con el suspendido Miss Reef por considerarlo "violencia de género".
"Es más, no creo que sea requisito tener que acceder al piscinazo para poder participar o ser elegida reina del Festival. Cuando la recordada y talentosa Celia Cruz fue coronada como soberana del evento musical, no cumplió con esa tradición. Entonces y tal como en esa ocasión, las participantes deben hacer uso de su libertad optando por elegir o desestimar tal acción sin que esto dañe o beneficie su candidatura", dijo Celis.