SANTIAGO.- Antes de que fuera la gran feria libre de productos de segunda mano que conocemos hoy; Antes de que se llenara de antiguos muebles, ropa, equipos electrónicos, antigüedades y cualquier tesoro imaginable, el
Persa Bío Bío, ubicado en el barrio Franklin, albergó las instalaciones del Matadero Público y luego, aprovechando el cuero que aquella actividad dejaba, fue zona de curtiembre, fábricas de cuero y de calzados.
"Lo interesante es que es un lugar para encontrar cosas únicas y también para encontrarse con gente de diferentes partes de Santiago", dice el artista urbano Cekis (Nelson Rivas), quien acaba de pintar en la zona el mural "Borde Sur".
La obra mide
500 metros cuadrados, se ubica en la cubierta de uno de los galpones y
es parte de un plan de activación artística en la zona. "La idea es diversificar el uso del Persa hacia actividades culturales", explica el arquitecto
Sebastián Cuevas, a cargo del proyecto.
Cuevas explica que el plan se está llevando a cabo específicamente en las dos manzanas que ocupa el Persa Víctor Manuel, que se despliega entre las calles Bío Bío, Víctor Manuel, Placer y San Isidro.
Ya han pintado en esa zona artistas como Mono González, Inti y Basco Vazko, quien hizo su obra en el cielo interior de uno de los galpones. "La idea de los murales surgió con Mono González, artista que tiene aquí su galería 'El taller del Mono' y comenzó a desarrollar el proyecto hace dos años", cuenta el arquitecto.
"Internet", mural de Basko Vazko al interior del Persa Víctor Manuel.
La obra "Borde Sur" se integra a este mismo circuito. El autor, radicado hace 10 años en Nueva York, explica el concepto: "Tiene que ver con las fronteras y como estas nos afectan en nuestras vidas. En mi caso, salir de Chile y ser inmigrante en otro país me afectó para siempre y cambió mi forma de verme a mí mismo. Borde Sur representa ese concepto, pero también tiene relación con la historia del lugar en sí, por que donde está situado fue una frontera o borde invisible al sur de la ciudad de Santiago. Las fronteras sirven para traspasarlas, están ahí, pero se pueden mover y derribar".
El mural demoró 15 días en pintarse. Cekis explica que primero hubo que darle un hidro lavado a la cubierta para sacar todo el polvo por los años a la intemperie y luego, aplicar una pintura base. Tras cuatro días pudieron trazar la cuadrícula para dibujar el diseño y después de dibujar, pintar con colores las formas, de un extremo hacia al otro.
"Quisimos trabajar en las tardes para saltarnos el calor, pero pronto tuvimos que volver a trabajar desde el mediodía por que necesitábamos trabajar más horas por días", explica. "Nunca había pintado un techo y menos de estas dimensiones, creo que es la superficie más grande que he pintado".
"Ahora tenemos que poner un sellante para protegerlo de la lluvia y los rayos UV", agrega Cuevas. "Yo pienso que pocos artistas aceptarían la invitación a morirse de calor y terminar el mural en tan corto tiempo. Esa es la ventaja de los artistas de la calle, que tienen la habilidad de actuar y entender rápidamente los espacios".
"Borde Sur", de Cekis, en proceso de pintado.
Paralelo a las mejoras artísticas, se está llevando a cabo un plan de mejoras estructurales, que incluirá nuevas cubiertas y sistema eléctrico para los locatarios. Cuevas asegura que las iniciativas se están llevando a cabo de la mano de los comerciantes. "Con un caballero que aquí vende pianos, organizamos un festival de jazz en enero", ejemplifica.
"El interés es hacer aparecer este espacio. Si hace tres meses alguien no sabía que existía este lugar, lo importante es hacerlo aparecer. Sacar del olvido a los galpones deshabitados del segundo piso, etc. Ese es el objetivo", sostiene el arquitecto. Además, explica que tienen en mente inaugurar en la zona
una nueva galería de arte popular a bajo costo.
Para quienes quieran conocer la obra "Borde Sur", se estará realizando un recorrido los domingos de febrero desde las 12:30 horas, que comenzará en la plaza central (en Placer con Victor Manuel, al interior del Persa), pasará por todas las obras del circuito y subirá hasta la cubierta. El proyecto es financiado de forma privada por el dueño de los nueve galpones que componen el Persa Víctor Manuel.