SANTIAGO.- Desde hace 50 años Frutillar, en la Región de Los Lagos, comenzó a convertirse en un gran polo cultural. La insignia en esta materia son las
Semanas Musicales que allí se celebran cada verano, llevando hasta el sur de Chile los mejor de la música clásica y lírica internacional. Pero no solo la música inunda de artes la localidad, puesto que con la instalación del
Teatro del Lago también se impulsaron en la zona el teatro y sobretodo, la danza.
La Escuela de Danza de Teatro del Lago se amparó en el teatro homónimo desde hace cinco años. Hoy, 93 de sus alumnos fueron certificados por la Royal Academy of Dance de Londres (RAD), prestigiosa academia internacional que verifica que los estudiantes cumplan con las técnicas y estándares de la institución internacional.
Es la quinta vez que los alumnos de la Escuela de Danza de Teatro del Lago aprueban la certificación, ante lo cual, la directora artística
Macarena Montecino afirma: "Estos cinco años de certificación por la RAD han sido momentos muy históricos y lindos porque cuando nuestros estudiantes asumen este desafío y son evaluados por esta examinadora, siempre hay un crecimiento tanto técnico como emocional".
Cabe destacar que esta escuela no tiene como objetivo final formar profesionales de la danza, sino entregar esta disciplina a cualquier persona que tenga interés en practicarla y, de este modo, "contribuir a mejorar su calidad de vida y desarrollo integral". No obstante, hay estudiantes que han encontrado su vocación en la danza y hoy estudian de manera profesional, como es el caso de Amalia Gimpel (15) en el Royal Ballet School de Londres y Belén Winkler (14) en la Escuela de Ballet de la Ópera de Paris.
Entre los alumnos recién certificados están Florencia Villaseca y Jean Phillipe Mathieu, ambos de 9 años. "Lo paso bien cuando bailo porque me gusta. He pasado muchos años en esta escuela y me gusta tanto que todos los años me inscribo en ballet", dice Florencia. "En la escuela he aprendido la danza, los pasos del ballet y su técnica. Me encanta el ballet y es importante en mi vida", sostiene Jean Phillipe.
También hay adultos, a quienes la danza les ha cambiado la vida, como es el caso de Rebeca Lopes (32). "Ha impactado muchísimo en mi vida, la ha dado vuelta completamente. Ahora trabajo en danza, tengo una escuelita que abrí en Pucón y tengo 24 alumnas, todo gracias a lo que he aprendido en el Teatro".
La Escuela de Danza de Teatro del Lago cuenta con cursos anuales para personas desde los 4 años en adelante, hombres y mujeres, con y sin experiencia previa.
