SANTIAGO.- Un complemento ideal para la trilogía de libros "50 sombras". Así se podría definir la nueva película
"Cuando ellas quieren", protagonizada por las ganadoras del
Oscar Diane Keaton, Jane Fonda y Mary Steenburgen, junto a la nominada
Candice Bergen.
La historia es así:
cuatro amigas exitosas, con una vida acomodada, llevan 40 años juntándose mensualmente para
comentar libros que alguna de ellas sugirió. Con todas ya siendo mayores de 60 años, Vivian (Fonda), quien lleva una vida sexual activa y nunca ha podido formalizar una relación, decide
sugerir que lean "50 sombras de Grey".
La lectura comienza a generar que
todas cuestionen su vida sexual. Diane (Keaton), quien quedó viuda hace un año, conoce a un nuevo amor y se abre a la
posibilidad de volver a tener relaciones sexuales. Carol (Steenburgen), una dueña de un restaurante quien continúa enamorada de su marido (Craig T. Nelson), empieza a sentir la necesidad de que él
reviva la vida sexual entre ambos; y Sharon (Bergen), una jueza federal que se deshizo del romanticismo después de divorciarse de Tom (Ed Begley) hace dos décadas, entiende que
no puede dejar de sentir orgasmos solo por pertenecer a la tercera edad.
El erotismo se sumerge en el club de lectura antes conservador y terminan leyendo la trilogía completa. Diane, quien se siente cortejada por un apuesto piloto (Andy García), está incluso dispuesta a mentir a sus hijas sobreprotectoras para emprender una aventura. Mientras, la jueza mojigata comienza a buscar citas en línea. Vivian, por su parte, quien desde su adolescencia ha rechazado el romance, se ve enfrentada a la reaparición de su único gran amor, interpretado por Don Johnson.
Las cuatro protagonistas compilan un gran número de
escenas memorables, cómicas, repletas de risas y que logran que el espectador se sienta familiarizado. Pese a ello, el filme dirigido por Bill Holderman, es en reiteradas ocasiones
excesivamente superficial y deja la sensación de haber
desaprovechado el talentoso y galardonado elenco con el que cuenta.
Crédito: El Mercurio.
Lo más molesto para críticos internacionales, ha sido el hecho de enaltecer un libro que habla de un sexo sadomasoquista y, en varias ocasiones, pervertido. Si bien se hace referencia explícita a algunas de las frases del escrito, en ningún momento se ve de forma crítica, y eso tal vez es lo que más se extrañó en el relato.
Totalmente acorde al género de la comedia, queda esa sensación de que estas actrices podrían no haber estado en algo tan dócil y haber construido algo un tanto más elaborado. Pese a todo, funciona y los espectadores salen contentos con el resultado.