Livia Giuggioli y Colin Firth permanecen casados desde 1997.
AFP
SANTIAGO.- A principios de marzo, los medios del espectáculo informaban que Colin Firth y su esposa Livia Giuggioli, se enfrentarían a un juicio tras demandar al periodista italiano Marco Brancaccia por presunto acoso y amenazas.
Tras algunos días de investigación, se conoció que el implicado
había sido amante de la productora de cine durante el breve período en que estuvo separada del actor ganador del Oscar en 2015.
La información fue confirmada por ambas partes.
Ni Giuggioli ni Firth habían querido hacer público su distanciamiento, pero la situación judicial provocó la confesión.
De acuerdo al matrimonio, cuando ellos decidieron retomar su relación, Brancaccia comenzó a tener un comportamiento fuera de lugar. El acusado, en tanto, sostuvo que jamás hostigó a Livia ni amenazó con destruir su matrimonio. Además, aseguró que lo de ellos fue algo más que un romance pasajero, ya que la intención era "construir un futuro juntos".
Ambas partes se enfrentaron en los juzgados de Roma por varias semanas, pero ahora la polémica dio un sorprendente giro. Entre ellos, llegaron a un acuerdo para "proteger sus respectivas vidas privadas".
Colin Firth y su esposa, se habían mostrado como una de las parejas más estables de Hollywood, y respecto a su vida familiar, siempre prefirieron mantener un bajo perfil. Razón que se estima habría pesado a la hora de no querer continuar con los alegatos en contra de Brancaccia.