SANTIAGO.- El actor argentino Ricardo Darín se refirió hoy a las acusaciones de maltrato laboral hechas en su contra por la actriz Valeria Bertucelli, y
las calificó como "una nube que me va a acompañar toda la vida".Sin embargo, el actor y director argentino agregó que es una
"nube abstracta poco definida, sin una acusación formal ni concreta. Por eso es tan difícil defenderse, porque parece que te obliga a atacar al que te ofende".
Darín se refería a las declaraciones de la actriz argentina
Valeria Bertucelli, quien aseguró recientemente haber sido víctima de un "destrato" cuando años atrás compartió en la obra de teatro "Escenas de la vida conyugal" con el actor, tiempo en el cual Darín la habría humillado "terriblemente", por lo que la actriz trasandina dijo que "algo que lo enaltecería mucho" a Ricardo "sería pedir disculpas".
Otra
colega, Érica Rivas, se unió después a las acusaciones asegurando haber sufrido un "maltrato personal y profesional del actor". Darín señaló que
"fue un error muy grande sacar en público una cuestión privada entre colegas cuatro o cinco años después", e insistió en que
ya hizo un pedido de disculpas de una cuestión que era privada. Lo difícil, recalcó, es defenderse "de la abstracción". "Lo único que puedo hacer es intentar ser mejor persona para reconciliarme conmigo mismo", añadió.
Darín emitió estas declaraciones en el marco de la 66° edición del Festival de San Sebastián, versión en la que el actor estrena junto a la actriz Mercedes Morán, la película "El amor menos pensado" del productor Juan Vera.
La película que debuta en el certamen
La cinta, una comedia dramática escrita a la medida de estos dos grandes del cine latinoamericano, es una reflexión sobre la relación de pareja después de unos pocos años de convivencia, explicó Darín.
"Todos tenemos miedo de quedarnos solos", afirmó el actor, felizmente casado y con "muy pocos" puntos de coincidencia con su personaje.
Ricardo Darín y Mercedes Morán son Marcos y Ana, un matrimonio que, a la partida del hijo del hogar, entra en una profunda crisis existencial. Aunque se quieren, este "nido vacío" abre entre ellos una atmósfera "en la que no pueden mentir", señaló Darín.
"El conflicto de esta película tiene que ver con que ellos se atreven a hacerse preguntas que surgen a partir de un juego oculto, enmascarado, del que hacen gala, que es decirse las cosas, siempre la verdad, y esto les lleva necesariamente a hacerse una serie de preguntas que, de otra manera, no se harían", agregó.
Sin disputa de por medio, casi como si se tratara de un nuevo proyecto en común, deciden separarse.
Morán, que hoy cumple años, consideró que "todas las parejas que comparten una cantidad de años juntos son interpelados por estas preguntas, si esto que tenemos es amor, amistad, compañerismo... La película anima a escuchar, a hacerse estas preguntas y a tomar decisiones y desde luego, desdramatiza la separación".
Para la actriz, la cinta "recuerda aquellas películas donde las escenas eran largas, habladas, y creo que es bonito, y la aceptación de la película -que ha sido un éxito de taquilla en Argentina- tiene que ver con eso, con volver a encontrarse con actores que actúan, que son dueños de sus escenas".
"Juan hizo un esfuerzo muy grande: no empuja a la emoción, no empuja a la risa, es sensible, habla de cosas que interesan y de las que importa hablar", resumió la actriz.
La 66° edición del Festival de San Sebastián arrancó hoy y se extenderá hasta el próximo 29 de septiembre.