SANTIAGO.- Vuelve la destacada obra del bel canto romántico "Norma" al Teatro Municipal de Santiago, después de 18 años. La ópera trata de una sacerdotisa de los druidas que se sacrifica por amor, y es considerada por su creador, Vincenzo Bellini, como "la mejor obra que ha escrito".
Las creaciones de Bellini son reconocidas por el protagonismo que le dan a sus intérpretes, y las largas canciones que se adecuan a los tipos de voz en forma extrema. En este caso el personaje principal es Norma, uno de los roles más expuestos y exigentes de la lírica.
La pieza tendrá siete funciones estelares e internacionales entre el 7 y el 17 de noviembre.
Los druidas eran personas misteriosas, filósofos y teólogos de la prehistoria en Europa. Eran considerados magos y brujos por las multitudes, pero en realidad contaban con una extensa educación, lo que les daba cierto prestigio. Estaban implicados en la vida política de su sociedad, y con la conquista de los romanos comenzó su declive.
En la ópera, Norma es la máxima líder de un grupo de druidas y sufre debido a una encrucijada romántica en la que se ve implicada, en medio de un contexto de dominio romano.
La puesta en escena resalta y destaca a la protagonista, la única que experimenta un cambio de vestuario y cuyos vestidos poseen una confección más compleja que la de los demás personajes. Asimismo, la exigencia y complejidad de los cantos que interpreta es mayor.
En el primer cuarto de la obra, la líder encabeza uno de los ritos más importantes de los druidas, la cosecha del muérdago, que debía ser retirada de los árboles con una hoz de oro. El bosque, que era sagrado para estos teólogos, es representado con un gran árbol que se toma el escenario en gran parte de la obra y que sumerge a los espectadores en el clima de cada escena, ya sea con los efectos de iluminación o con otros recursos escenográficos.
Con dirección musical de Konstantin Chudovsky y Pedro-Pablo Prudencio, esta versión de Francesca Zambello, directora general y artística del Festival de Glimmerglass y directora artística de la Washington National Opera, promete ser una Norma audaz e innovadora, y cuenta con un gran montaje escénico.
La ópera se lleva a cabo en dos actos con libreto de Felice Romani, basado en la obra de Norma ou l’Infanticide de Alexandre Soumet. El primer estreno se realizó en La Scala de Milán el 26 de diciembre de 1831.