SANTIAGO.- La muerte de
Víctor Jara fue uno de los temas que marcó la agenda nacional en 2018. Tras más de 40 años buscando justicia, la familia del cantautor vio cómo Miguel Vázquez, ministro en visita de la Corte de Apelaciones de Santiago por causas de Derechos Humanos,
condenó a ocho militares en retiro del Ejército a 15 años y un día en calidad de autores del homicidio acontecido el 16 de septiembre de 1973 en el
Estadio Chile, actual Estadio Víctor Jara.
A meses de esta resolución, que la esposa e hijas de Jara calificaron como "una derrota importante para los que quieren negar la historia y un duro golpe a la impunidad",
Netflix estrenó el cuarto capítulo de su serie
"Remastered" que aborda los últimos días del artista nacional y la posterior lucha de sus cercanos para encontrar a los responsables de su muerte.
En poco más de una hora de duración, el director
Bert-Jorgen Perlmuntt recorre los últimos años de vida del autor de
"Te recuerdo Amanda". A Jara se le ve en entrevistas en televisión, entonando sus temas sobre los conflictos sociales, y acompañando a
Salvador Allende en su campaña presidencial en 1970.
En la segunda mitad del documental, se revelan testimonios del asesinato del músico. Entre las frases que marcan los relatos de los ex presos políticos, está que el artista murió
"bajo tortura". "Cuando todos llegamos al Estadio Chile, nos formaron en fila. Después, un oficial sacó a Víctor y le dijo: 'Vo soy Víctor Jara', y ahí le indica que le va a enseñar algo", cuenta uno de los dos testigos que colaboraron con la pieza audiovisual.
Foto: s/c
"El soldado lo golpea con el fusil en la cabeza. Lo golpearon en la cara. Casi le revientan un ojo.
Le aplastaron las manos y le dijeron que si acaso ahora iba a poder tocar la guitarra.
Víctor no fue sólo fusilado, fue asesinado de la peor manera: bajo tortura", continúa.
Mientras las imágenes muestran a
Joan Jara, la esposa de Víctor, llegando a
reconocer el cuerpo de su marido a la vía pública, donde yacía junto a los cadáveres de otras personas que igualmente fueron asesinadas a balazos, la voz de Joan se escucha relatando lo complejo que fue para ella asumir la muerte de su "compañero".
Joan Jara. Foto: Archivo El Mercurio
En un principio, las frases de Joan corresponden a entrevistas que dio al poco tiempo del
Golpe Militar, pero luego se le muestra en la actualidad, con 92 años, mientras recuerda con evidente tristeza la partida del intérprete y las cuatro décadas que pasó buscando a los responsables. Pese al dolor de su pérdida, reflexiona que el legado de su esposo ha pasado de "generación a generación".
"Cuando regreso a Chile es como si él viviera", declara.
El ex teniente que niega haber cometido el asesinato de Víctor Jara
En el mismo mes de junio, cuando los ocho ex miembros del Ejército fueron condenados por la muerte de Jara, el ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Ampuero, confirmó que iniciarían las gestiones para extraditar desde Estados Unidos a quien sería el real autor del asesinato del cantor:
Pedro Pablo Barrientos.
El ex militar, quien ostentaba el cargo de teniente en los años '70, permanece en el país norteamericano desde 1990, y allá fue declarado culpable de torturas y asesinato contra el artista. La justicia de Deltona, Florida, consideró una serie de
testimonios de ex soldados que aseguraron haber visto a Barrientos en el Estadio Chile disparando a Jara.
Aunque son cerca de cinco los hombres que lo acusan, él insiste en su inocencia. En los 20 minutos finales del documental, el otrora teniente asegura que nunca estuvo en el Estadio Chile, que no lo conoció y que,
"por razones políticas", le han "arruinado la vida".
"Me quieren en Chile como un trofeo político", sostiene, manifestando además que nunca volverá a pisar el país.
"Primero muerto antes de regresar", dice.
En las imágenes se ve a Barrientos siendo sometido a un
detector de mentiras donde le consultan respecto a su presunta responsabilidad en el asesinato del ícono de la música nacional.
Los resultados: inconclusos. El técnico a cargo de la máquina, advirtió a las cámaras que Barrientos se estaba moviendo y respirando en exceso, lo que alteraba el funcionamiento del dispositivo, pero aclaró que, en su experiencia, la mayoría de quienes se inquietan a la hora de estar sometidos al detector, mienten.
Pedro Pablo Barrientos se fue de Chile cuando llegó la democracia, según él, "para hacer una nueva vida". Su testimonio, en el que además asevera que
jamás torturó a alguien, es apoyado por dos escoltas que estaban a su mando en septiembre del '73, y también por su ex esposa. Todos ellos lo destacan como "un hombre bueno", que nunca se acercó siquiera al actual Estadio Víctor Jara.
Pese a su defensa, la justicia en Estados Unidos lo condenó en 2015 a pagar una compensación millonaria a la familia de Jara por daños y perjuicios.
"Remastered: Masacre en el Estadio" se estrena este viernes en Netflix.
