MADRID.- El líder de The Smashing Pumpkins, Billy Corgan, ha recuperado 27 años después una guitarra Fender Stratocaster que le robaron en 1992 después de un concierto en Detroit.
Se trata de la guitarra que usó para grabar el álbum debut de la banda, Gish (1991), y Corgan la recupera justo ahora que están en plena gira de reunión con la vuelta del guitarrista James Iha y el baterista Jimmy Chamberlin.
Por eso, lo ve como una señal, tal y como ha declarado a Rolling Stone: "La llevaré donde sea y la arreglaré. Voy a empezar a usarla. Es una guitarra realmente valiosa para mí".
"El tiempo es extraño y sospechoso, así que me lo tomo como una señal de que debe formar parte de lo que estamos haciendo", reflexiona Corgan sobre el regreso de su querida guitarra, justo ahora que mira al pasado más que nunca, tocando incluso viejas canciones en vivo.
Créditos: Captura rollingstone.com
Los últimos doce años la guitarra ha pertenecido a una mujer de Detroit que la compró en una venta de segunda mano en un garaje por 200 dólares como elemento decorativo para su sótano. Cansada de verla, pensó en venderla para conseguir algo de dinero e, investigando con una amiga para conocer su valor, se dieron cuenta de que podría ser la guitarra perdida de Billy Corgan.
Tras varios intentos, consiguieron contactar con el músico, quien finalmente se presentó en su casa del norte de Michigan. "Si miras a Billy, es muy estoico", explica la hasta ahora dueña, Beth James, a Rolling Stone: "Él no da muchas expresiones faciales. Pero
él miró hacia abajo y cuando abrió el estuche, lo miró por un segundo y se quedó inmóvil. Todos estaban en silencio. Estaba muy feliz".
Aquella era la guitarra favorita del artista porque cambió al grupo musical desde la primera vez que la hizo sonar. "Al instante cambió la forma en que sonaba la banda y la forma en que yo tocaba", explicó Corgan al medio estadounidense. "Cuando fue robada no fue como: 'Oh, valla, mi guitarra acaba de ser robada'. Fue la guitarra que afectó mi forma de tocar y con la que me identificaba mucho".
Anteriormente el músico había recibido muchas falsas alarmas y en un comienzo no se hizo muchas ilusiones con este nuevo aviso, pero cuando la vio en persona la reconoció inmediatamente, pues encontró en ella unas marcas que recordaba y que nunca reveló a la prensa: unas quemaduras de cigarro en el cabezal y las iniciales "KM" que un dueño anterior había grabado en ella.
Billy estaba dispuesto a pagar los 20.000 dólares de recompensa que había ofrecido en 2009 por recuperar el instrumento, pero Beth no quiso el dinero. "Dios la bendiga. Esto entra en la categoría de milagros que pueden ocurrir. Incluso para un cínico como yo", remata el músico.
