No es una película biográfica, pero de todas formas repasa parte de la infancia y la vida actual de Alexis Sánchez. Así se podría definir a grandes rasgos "Mi Amigo Alexis", el filme chileno producido por Fábula que aborda temas como la amistad, el deporte, la pobreza y la educación.
La película, que tuvo una convocada
avant premiere que incluyó incluso una alfombra roja, llega este jueves a la cartelera nacional con al menos
60 pantallas disponibles en los cines de todo el país, augurando buenos resultados en la taquilla.
Dirigida por
Alejandro Fernández Almendras ("Huacho"), cuenta la historia de Tito (
Luciano González), un joven de Recoleta que tiene talento para el fútbol y cuyo padre (
Daniel Muñoz) lo presiona para que
se convierta en futbolista profesional.
En una aventura junto a su hermana y una amiga del barrio, Tito visita el complejo deportivo Juan Pinto Durán para ver de cerca a sus ídolos de la Selección Chilena. En una confusa situación, todos terminan dentro del recinto y Tito queda encerrado en el maletero de un lujoso auto.
Foto: Fábula
A partir de esta casualidad, conoce a Alexis Sánchez, quien decide llevarlo a su casa y desde ahí contactar a sus padres. Ambos comienzan a entablar una especie de amistad que en pocas ocasiones traspasa las barreras del fútbol.
El gran protagonista de la historia es efectivamente Tito, quien sufre la violencia psicológica de su padre y vive momentos de tristeza por la presión de
elegir a temprana edad cuál será su futuro. Así, la película se convierte en un
vaivén de emociones entre penas por la relación familiar de Tito y la alegría de compartir con su ídolo del fútbol.
Alexis, en tanto, tiene un cuestionable debut en el cine, pero se valora su ánimo de querer transmitir parte de su historia a quienes lo admiran. Su infancia, que llega en formato de flashbacks en las canchas de tierra de Tocopilla, resalta la humildad de su entorno y el esfuerzo para salir adelante. En cuanto a su vida actual, también se intenta transmitir ese espíritu humilde, pero se opaca ante las excesivas ostentaciones de sus bienes.
Foto: Fábula
Los primeros minutos de la película parecen dirigir la trama hacia una historia de alegrías y momentos de reflexión que abarcan la realidad chilena, pero en la parte final todo se torna más bien confuso y forzado hacia entregar un mensaje de cercanía de Alexis con la gente, lo que se da con una escena en particular en que el delantero juega con los niños del barrio de Tito, la que definitivamente está de más.
Lo que sí hay que valorar es la calidad del casting que se realizó para encontrar a los niños que protagonizaron la película. Todos ellos, sin tener experiencia, se lucen con buenos diálogos y con la naturalidad necesaria para darle continuidad a la trama.