Organizaciones y rostros de la industria audiovisual chilena, manifestaron este viernes su descontento con la decisión del BancoEstado de poner fin a su Programa de Fomento del Cine Chileno, el que fue inaugurado en 2005 y que entregaba $200 millones anuales.
Gremios como la Asociación de Productores de Cine y Televisión (APCT), la Federación Audiovisual y los Sindicatos de Actores y Técnicos, incluyendo a premiados directores nacionales como Sebastián Lelio, Pablo Larraín y Silvio Caiozzi, encabezaron un encuentro en el que emplazaron a la entidad pública a "reevaluar esta medida".
"Creemos que poner fin a este programa, y además con esos argumentos,
es a lo menos incomprensible.
BancoEstado ha sido una de las pocas empresas estatales que ha apoyado de manera sistemática nuestra industria, lo que valoramos y creemos que debería ser motivo de orgullo", señalaron, resaltando además que en los últimos años el cine local "
ha logrado alcanzar los más altos reconocimientos internacionales y está en uno de sus mejores momentos".
Según explicaron, en sus 14 años de existencia, el fondo ha premiado a más de 110 títulos, entre los que se encuentran distinguidas producciones como "Machuca", "Una mujer fantástica", "No", "Historia de un Oso", "Casa Lobo" y "Mala junta".
"Consideramos un error que el apoyo a las industrias creativas no forme parte del giro de una empresa pública. Las economías creativas o economía naranja se fomenta en todos los países del mundo a través de políticas públicas consistentes, por tratarse de industrias limpias, de alta calificación profesional, que generan empleo y tienen altos estándares de responsabilidad sociales y cultural", añadieron.
De acuerdo a sus palabras, el fin de este programa responde "a la falta de una política pública que fomente el desarrollo de la industria" y que "ninguna política de austeridad puede justificar que termine el compromiso del Estado con las industrias creativas y el audiovisual".