La Municipalidad de Nueva York quiere trasladar el icónico toro de la ciudad por razones de seguridad.
Reuters
La Municipalidad de Nueva York desistió, por ahora, de sus planes para mover la famosa estatua de bronce del toro del lugar que ocupa desde 1989, en el bajo Manhattan, para ubicarla cerca del edificio de la Bolsa de Valores (NYSE) en Wall Street.
La ciudad retiró su solicitud para el traslado de la estatua que había presentado ante la Comisión de Diseño Público, señaló el New York Post.
"Todavía
estamos trabajando para finalizar la ubicación", indicó sin embargo al diario la vocera de la Municipalidad, Jane Meyer.
Los planes de la alcaldía provocaron una controversia con el escultor de la obra, Arturo Di Modica, que se opone a los planes que se conocieron la pasada semana, decisión que según la Municipalidad se tomó por razones de seguridad.
Luego de ciertos ataques con vehículo ocurridos en la ciudad en el año 2017, la Policía y el Departamento de Transporte comenzaron a trabajar para identificar lugares de alto riesgo y entre ellos se identificó esta estatua, de 3.200 kilos, que es visitada por miles de personas cada año.
Uno de esos ataques ocurrió el 31 de octubre del 2017, cuando un presunto terrorista embistió a un grupo de ciclistas con un vehículo, lo que provocó la muerte de ocho personas y una decena de heridos.
Meyer rechazó que la oposición del escultor haya provocado la decisión de la municipalidad pese a que Di Modica dijo que tiene los derechos de autor.
El escultor dijo al Post que su obra no puede ser usada para fines comerciales sin su consentimiento.
Argumentó que la NYSE es una compañía privada y que instalar allí su obra anularía sus derechos de autor y marca, y el toro pasaría a ser el toro de la Bolsa de Valores.
"Me siento muy decepcionado de cómo mi escultura ha sido tratada con nada más que desprecio", dijo además al Post.
