Con solo nominados y sus acompañantes, y sin la fiesta oficial posterior. Estas son algunas de las
medidas que han tomado los Oscar para respetar las restricciones de la pandemia sin tener que optar por una ceremonia completamente virtual.
La revista Variety publicó una carta del presidente de la Academia de Hollywood, David Rubin, en la que desvela algunas pistas de lo que los Oscar están preparando para la
ceremonia del 25 de abril (fue pospuesta dos meses para tratar de esquivar el impacto del coronavirus).
"Este año,
los que asistan a los premios en persona serán los nominados, sus acompañantes y los presentadores", explicó Rubin en su carta.
Esto reducirá en gran parte el número de personas que acudan a los Oscar al
eliminar, por ejemplo,
las entradas que la Academia sorteaba entre sus miembros para ir a la gran gala del cine.
Rubin también lamentó que en esta ocasión
tendrán que prescindir de otros eventos muy importantes y queridos de los Oscar,
como el almuerzo de los nominados en las semanas previas
o la fiesta oficial (Governor's Ball) que tiene lugar justo después de la ceremonia.
El presidente de la Academia dijo que ahora mismo
la prioridad es la seguridad y la salud de los asistentes, pero se mostró confiado en que los Oscar de la pandemia serán "únicos" y "memorables".
Rubin también adelantó que la entrega de los galardones
se retransmitirá desde dos lugares diferentes:
el Dolby Theatre de Los Angeles (EE.UU.), el hogar habitual de los Oscar,
y desde Union Station, la estación central de la ciudad californiana y una novedad en esta ocasión.
Soderbergh al frente
A la espera de que se concreten al cien por cien todos los detalles de la gala, lo que sí está confirmado es que
Steven Soderbergh producirá junto a Stacey Sher y Jesse Collins esta ceremonia de los Oscar.
"Los próximos Oscar
son la ocasión perfecta para la innovación y para reimaginar las posibilidades de los premios", dijo Rubin en diciembre.
"
Estamos entusiasmados y aterrorizados por igual", ironizaron Soderbergh, Sher y Collins, que debutarán como productores de los Oscar.
"Debido a la extraordinaria situación en la que nos encontramos todos, hay una oportunidad de enfocarnos de una manera nueva en las películas y en la gente que las hace, y esperamos crear un show que realmente se sienta como las películas que todos amamos", afirmaron.
Collins ha producido galas como los Grammy, mientras que Sher optó al Oscar a la Mejor película por las cintas "Erin Brockovich" (2000) y "Django Unchained" (2012).
Por su parte, Soderbergh es uno de los cineastas más respetados y prolíficos del panorama contemporáneo. Se llevó el Oscar a la mejor dirección por "Traffic" (2000), y su muy variada filmografía incluye títulos como "Sexo, mentiras y video" (1989), la trilogía de "Ocean's Eleven" (2001, 2004, 2007), o el díptico sobre el Che Guevara "Che: Part One" y "Che: Part Two" (ambas de 2008).