Macarena Pérez, El Mercurio
A las 21:00 en punto se apagaron las luces del Movistar Arena que estaba repleto, y salió la icónica banda al encuentro con el público. Flea hizo una invertida para luego tomar su bajo y hacer el intro jam para calentar el ambiente, que luego dio paso a "Around the World".
Los Red Hot Chili Peppers llegaron a Chile por séptima vez en el marco de su gira mundial "Global Stadium Tour", y cantaron durante una hora y cuarenta minutos, donde hicieron un recorrido por su extensa carrera musical.
La novedad de la noche sin duda, fue el regreso del guitarrista John Frusciante, quien volvió al grupo en el año 2019, pero no se presentaba en Chile desde el 2002. Gran parte de los aplausos se los llevó él, quien además tuvo algunos momentos en solitario.
Los artistas salieron todos vestidos y no con el torso descubierto como lo hacen frecuentemente. Frusciante estaba con un polera y pantalones estampados; Flea con una sudadera y una pollera larga morada; el vocalista, Anthony Kiedis, con una polera blanca y unos bermudas de jeans oscuro con un conejo con tachas. En tanto, el baterista Chad Smith lució un traje blanco que tenía unos tigres estampados.
Cantaron "The Zephyr Song", "Acuatic Mouth Dance", y cuando llegó el turno de "Dani California", Fuscianti entonó una parte sin el vocalista, momento que estuvo marcado por una gran ovación por parte del público.
Además el guitarrista hizo una pausa con "Terrapin" de Syd Barret, y los asistentes corearon "John Frusciante, John Frusciante, John Frusciante", sin embargo, él nunca respondió ni interactuó con quienes esperaron verlo por tanto tiempo.
El show fue solamente la batería, el bajo, la guitarra, la voz de Keidis, y algunas luces. El enérgico Flea saltó, bailó y corrió por el escenario a lo largo de todo el concierto, y el vocalista hizo lo mismo en varias ocasiones.
La banda es reconocida por no interactuar mucho con el público, pero esta vez, lo realizaron varias veces. El vocalista protagonizó un diálogo en español con el bajista. "Cómo estás", comenzó diciendo Flea, "Todo muy bien y tú", le contestó Keidis. "Tengo mucha luz en mi cabeza. No lo aguanto", agregó el primero.
Justo antes de cantar los clásicos "Otherside" y "Soul to Squeeze", se escuchó en el Movistar Arena el típico "olé, olé, olé," y Flea siguió al público. Además el baterista lanzó sus baquetas en varias ocasiones.
De los nuevos temas, interpretaron "Eddie" y "Carry me Home", para después pasar a "Right on Time", "Hard to Concentrate" y "Throw Away Your Television".
Hacia el final del concierto, llegó el turno de
"Californication", y "Black Summer", ambas fueron muy ovacionadas, y el bajista volvió a compartir unas palabras con los fanáticos:
"Estamos muy felices y agradecidos de estar junto a ustedes. Gracias por acompañarnos siempre".
Después dieron paso a "By the Way" y se despidieron. El Movistar Arena volvió a iluminarse y los asistentes se quedaron gritando, y pidiendo que la banda volviera al escenario.
Luego de unos minutos, salieron nuevamente para cantar el clásico "Under the Bridge", e interpretar la última canción del concierto que fue "Give it Away". Antes de que se retiraran, el baterista dijo: "Muchas gracias, espero vernos de nuevo", y volvió a lanzar las baquetas hacia el público, cerrando así su primera noche en Santiago.
La banda de rock se volverá a presentar en el Movistar Arena el martes 21 de noviembre, se encuentran todas las ubicaciones agotadas.