WASHINGTON.- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitó a quienes integran la Organización de los Estados Americanos (OEA) a derogar la pena de muerte o imponer una moratoria a su aplicación como paso hacia la abolición.
LA CIDH hizo este llamado coincidiendo con el aniversario número 25 de la adopción del protocolo relativo a esta temática a la Convención Americana sobre DD.HH.
De momento, éste ha sido ratificado por Chile, Argentina, Ecuador, Brasil, Venezuela, República Dominicana, Honduras, México, Panamá, Nicaragua, Paraguay, Uruguay y Costa Rica.
La CIDH pidió también a Bolivia, Colombia, El Salvador, Guatemala, Haití, Perú y Surinam a que lo corroboren. La Comisión recordó que los países de las Américas tienen una larga tradición abolicionista.
Venezuela fue el primer país del mundo en abolir la pena de muerte para todos los delitos en 1863, mientras que Surinam fue el último en sumarse (en marzo de este año) al grupo de países de las Américas donde la pena de muerte está abolida.
Catorce naciones mantienen este tipo de condena, pero no realizan ejecuciones desde 2008: Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Belize, Cuba, Dominica, Grenada, Guatemala, Guyana, Jamaica, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas y Trinidad y Tobago.
Estados Unidos es actualmente el único país de América donde se llevan a cabo ejecuciones de personas condenadas a la pena capital. No obstante, la CIDH observa que ha disminuido gradualmente.
Con la decisión adoptada en mayo de este año por el estado de Nebraska, la pena de muerte está abolida en 19 estados y el Distrito de Columbia.