DALLAS.- Conforme pasan las horas se revelan más detalles
del ataque emprendido contra el cuartel general de la policía de Dallas, en Texas, que deja hasta ahora un sospechoso muerto.
El autor de la acción distribuyó explosivos frente al recinto y se encerró en una van mientras negociaba con los agentes. Finalmente fue abatido por el disparo de un francotirador policial: el disparo atravesó el parabrisas y alcanzó al hombre.
El supuesto atacante fue identificado en un primer momento como James Boulware. Según antecedentes policiales, el individuo llamó al número de emergencia 911 para acusar a los agentes de haberlo culpado injustamente en un caso en el que perdió la custodia de un niño.
Hasta el momento, las autoridades descartan que el caso se relacione con una acción terrorista.
Los disparos sacudieron el sector poco después de la medianoche, cuando el sujeto abrió fuego contra el cuartel y luego instaló bolsas con explosivos en el sector.
Disparos en todas direccionesLos disparos atravesaron los ventanales del edificio. Milagrosamente, hasta el momento no se ha informado de personas heridas dentro del inmueble.
Uno de los funcionarios, quien se encontraba en el vestíbulo, se había levantado segundos antes para buscar una bebida cuando comenzó el tiroteo. Los agujeros que dejaron las balas muestran que con seguridad habría sido alcanzado si no se hubiera movido, según un reporte del canal CNN.
Los disparos también llegaron hasta otros edificios en el área. El habitante de un departamento sintió las balas cerca cuando captaba desde la ventana de su residencia un video del incidente en su teléfono móvil.
"Escuché ruidos secos sobre mi cabeza, así que podría decir que los tiros venían en nuestra dirección", describió Rick Birt, un ex infante de marina.
La policía debió desplegar robots contra explosivos para neutralizar las cargas explosivas que el atacante lanzó en el sector. Un policía estuvo a punto de tropezar con un paquete de bombas listo para estallar al contacto.
"Si lo hubiera tocado, no habría sobrevivido", admitió David Brown, jefe de la Policía de Dallas.
Tras los disparos y la colocación de las bombas, el sujeto huyó en la van hasta que fue ubicado por los agentes en el estacionamiento de un restaurante fuera de la ciudad.
Allí, tras larga negociación en la que el individuo se mostraba cada vez más alterado mientras amenazaba con hacer volar una carga de explosivo C-4 que decía transportar, fue alcanzado por la bala calibre .50 de un tirador especializado del equipo SWAT local.
"Creo que hicieron lo correcto para detener la violenta acción" del hombre, señaló Brown.
El cuerpo permaneció largo tiempo dentro de la van mientras un robot antibombas revisaba palmo a palmo el vehículo.
La policía ahora realiza pesquisas para confirmar la identidad del fallecido. Antecedentes preliminares indicaban que tendría antecedentes de violencia intrafamiliar.
