TOKIO.- Unas 5.000 personas, incluyendo el primer ministro de Japón y el embajador de Estados Unidos en el país, participaron en una ceremonia para recordar el 70 aniversario de la batalla de Okinawa de la Segunda Guerra Mundial.
Los asistentes al acto del martes en el Peace Memorial Park de Okinawa guardaron un minuto de silencio.
Naeko Teruya, representante de las familias de las víctimas, dijo que se siguen encontrando restos y bombas que en su día no estallaron bajo tierra y en lugares donde se realizan obras.
"Seguimos sintiendo que la guerra no ha terminado en realidad", dijo.
Entre las más de 200.000 personas que murieron en la batalla por Okinawa, en los últimos meses de la Segunda Guerra Mundial, había muchos civiles.
