El líder israelí aseguró que el barco detenido es "una demostración de hipocresía que solo ayuda a la organización terrorista Hamás".
Reuters.
JERUSALÉN.- El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, alabó la "decidida y eficiente" labor de las fuerzas armadas israelíes en detener la Flotilla que viajaba rumbo a Gaza, mientras que los organizadores denuncian al país de piratería.
"Me gustaría felicitar a los marineros y comandantes de la armada israelí por su decidida y eficiente acción en detener a los pasajeros del barco que ha tratado de alcanzar la costa de Gaza en contravención a la ley", afirmó el primer ministro en un comunicado divulgado por su oficina.
Lo hizo horas después de que las fuerzas navales israelíes abordaran el Marianne, una de las cuatro embarcaciones que, dentro de la iniciativa de la Flotilla de la Libertad III, navegaba rumbo a Gaza para romper el férreo bloqueo marítimo impuesto por Israel sobre Gaza ocho años atrás, aclararon los organizadores.
El barco fue asaltado a 100 millas náuticas de la costa gazatí sin altercados y los 18 activistas que viajaban a bordo, entre ellos el diputado palestino con nacionalidad israelí Basel Ghatas, el expresidente tunecino Moncef Marzouki o la eurodiputada Ana Miranda, es remolcado por las autoridades israelíes hasta el puerto israelí de Ashdod.
Según explicó Manuel Espinar, uno de los portavoces de la plataforma Rumbo a Gaza, el resto de los barcos se retiraron.
"Esta flotilla no es sino una demostración de hipocresía y mentiras que tan solo ayuda a la organización terrorista Hamás e ignora todos los horrores de la región. Evitar que entrara por mar fue hecho de acuerdo con la ley internacional e incluso recibió el respaldo de un comité de la ONU", abundó Netanyahu.
Según el primer ministro, en Gaza "no hay ningún bloqueo" porque permiten la entrada de ayuda humanitaria.
Sin embargo, Espinar destacó que, en su opinión, lo más grave es que "una vez más, Israel no ha cumplido con las normas de la ley internacional. Asaltar un barco pacífico y civil en aguas internacionales" a una distancia de 100 millas náuticas constituye "una vulneración del derecho internacional".
"Queremos denunciar la complicidad de nuestros gobiernos, es un escándalo, una vergüenza que se permita la piratería en aguas internacionales de esta manera", denunció el activista.
Está previsto que el barco interceptado por la armada israelí arribe a la costa del país a lo largo de la jornada de hoy entre la incertidumbre de qué sucederá con los activistas.
Desde Rumbo a Gaza piden "a la comunidad internacional que se vigile y exija la libertad inmediata de estos activistas y que se garantice que nada suceda a los ciudadanos israelíes que han tenido el valor de decir que no todos los israelíes opinan igual",
