LONDRES.- El ministro de Finanzas británico, George Osborne, intentará bloquear cualquier intento de la Unión Europea de incluir dinero británico en un nuevo programa de rescate a Grecia, informaron este martes varios medios de comunicación.
Osborne subrayó la oposición británica a participar en la refinanciación de Grecia durante las conversaciones telefónicas con sus homólogos europeos antes de la reunión del martes entre miembros del Eurogrupo en Bruselas, según el Financial Times y otras publicaciones.
"Nuestros colegas de la eurozona recibieron un mensaje fuerte y claro, según el cual no sería aceptable modificar en esta ocasión la posición británica sobre los programas europeos de rescate financiero", indicó una fuente del ministerio de Finanzas.
En 2010, el primer ministro británico, David Cameron, anunció haber alcanzado un acuerdo sobre la imposibilidad de utilizar el Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera (MEEF), en el que participan los 28 países miembros de la Unión Europea, en el rescate de países de la eurozona, tras usarse para Irlanda y Portugal.
Únicamente los 19 miembros de la moneda única deberían responsabilizarse de suscribir programas de rescate en el marco de un nuevo fondo utilizable en crisis como la que atraviesa Grecia actualmente.
Grecia no pagó este lunes el vencimiento debido al FMI por valor de unos 500 millones de dólares, lo que significa que su deuda con el organismo asciende ahora a cerca de unos 2.190 millones de dólares después de su impago del pasado 30 de junio.
"El pago de 456 millones de euros cuyo plazo vencía hoy por Grecia al FMI no fueron recibidos. Hemos informado al Directorio Ejecutivo de este hecho. La mora de Grecia con el FMI se sitúa hasta la fecha en cerca de 2.000 millones de euros", indicó Gerry Rice, portavoz de la institución en un comunicado.
El impago con el Fondo Monetario Internacional (FMI) coincide con el acuerdo alcanzado a última hora, después de semanas de tensiones, con los acreedores internacionales en Bruselas, por el que Grecia acuerda aplicar un duro paquete de reformas estructurales y ajuste fiscal para encauzar sus cuentas públicas a cambio de un tercer rescate financiero.