Cristián Moscoso en el video distribuido por las FARC.
AFP
BOGOTÁ.- El subteniente del ejército colombiano Cristián Moscoso, quien permaneció 12 días en poder de las FARC y fue liberado el domingo en vísperas de la tregua unilateral iniciada este lunes por la guerrilla comunista, habló sobre esta experiencia en un video difundido por los rebeldes en su sitio web.
"Yo hablo de los (guerrilleros) que estuvieron conmigo; me dieron un trato digno, a partir del momento en que caímos en la emboscada", dijo Moscoso a Joaquín Gómez, comandante del Bloque Sur, presente durante la entrega del militar en un operativo humanitario a cargo del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
El oficial, de 26 años, relató detalles de su captura en enfrentamientos el pasado 7 de julio en Putumayo (sur), donde también murió un uniformado y dos más resultaron heridos.
El subteniente aseguró que cayó herido por levantar "mucho el brazo en el instante en que iba a cambiar el proveedor del fusil" y añadió que cuando se dio cuenta "ya tenía la guerrilla encima".
"Ellos me decían que me iban a curar y que cuando ya estuviera bien me entregaban, pero yo no les creí, yo sólo les decía que si me iban a matar que me dejaran en un lugar donde mi familia me pudiera encontrar", relató el oficial, de pie en un lugar selvático, vestido con un pantalón azul y con el brazo izquierdo vendado.
Gómez, que lucía de civil, escuchó cómo una guerrillera, a la que Moscoso identificó como Eliana y que estuvo en el combate, le lavó la ropa ensangretada y lo ayudó en las extensas caminatas que debió hacer mientras estuvo cautivo.
El subteniente fue liberado un día antes del alto al fuego unilateral que las FARC comenzó este lunes en el marco del proceso de paz que avanzan en Cuba con el Gobierno desde noviembre de 2012.
Desde la guerrilla comunista, principal y más antiguo grupo rebelde de Colombia, se comprometieron a principios de ese año a no secuestrar más civiles, pero se reservaron el derecho de apresar a policías o militares, a los que considera prisioneros de guerra.
Este país vive un conflicto armado de más de medio siglo en el que han participado guerrillas, paramilitares y agentes del Estado, y que ha dejado oficialmente al menos 220.000 muertos y más de seis millones de desplazados.