BOGOTÁ.- Dos soldados murieron este viernes tras caer en un campo minado en la provincia de Norte de Santander, en la frontera con Venezuela, cuando daban seguridad a ingenieros que realizan trabajos de reparación del oleoducto Caño Limón Coveñas.
Los militares, que pertenecían a la Fuerza de Tarea Vulcano, fueron identificados como Juan Carlos Duque Riaño y Wilder Mejía González, y fallecieron en el sitio conocido como Nariz del Diablo del caserío La Cecilia, zona rural del municipio de Teorama.
El lugar donde ocurrió el incidente forma parte de la zona selvática de El Catatumbo, en la cual operan las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Ejército Popular de Liberación (EPL).
"No hemos determinado cuál grupo activó los explosivos, pero los tres han actuado en conjunto en varios ataques", manifestó el coronel Jair Guerrero, comandante de la Brigada Móvil 33 del Ejército.
El oficial agregó que esa región "es un sector usado para el tráfico de armas y transporte de insumos" para el narcotráfico, ya que El Catatumbo es una de las áreas con más cultivos de coca del país.
En junio pasado, cinco militares perdieron la vida cerca de El Aserrío, en la misma zona rural de Teorama, cuando un helicóptero Black Hawk del Ejército activó una mina al aterrizar para un desembarco militar, acción que fue atribuida al ELN.
