ASUNCIÓN.- Cerca de un centenar de mujeres paraguayas amamantaron hoy simultáneamente a sus bebés en las escalinatas del Congreso de Paraguay, para concienciar sobre la importancia de la lactancia materna y solicitar que se alarguen los permisos por maternidad.
La iniciativa, conocida como "mamatón", sirvió como cierre a la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que se conmemora del 1 al 7 de agosto en más de 100 países en todo el mundo.
Cargadas con sus bebés en brazos o amarrados a sus pechos por grandes pañuelos, y a veces incluso con un pequeño aferrado a cada pezón, las manifestantes alimentaron a sus hijos en plena calle para pedir que se acelere en el Senado la aprobación de un proyecto de ley que regula los permisos maternales y ofrece facilidades para que las madres puedan compaginar trabajo y lactancia.
De hecho, en Paraguay sólo un 25 % de las madres dan de mamar a sus hijos, en gran parte debido al "retorno precoz a los puestos de trabajo o estudio", explicó a Efe María de los Ángeles Acosta, jefa del Programa Nacional de Lactancia Materna del Ministerio de Salud Pública (MSP).
"En el sector privado, las mujeres sólo tienen 63 días de permiso por maternidad, a pesar de que la ley establece que sean 84 días. Además, durante ese período solo perciben el 50 % de su salario, por lo que se ven obligadas a volver antes a trabajar", destacó Acosta.
Por ello, las manifestantes pidieron hoy que se amplíen los permisos por maternidad tanto en el sector privado como en el público, y que en ambos casos las mujeres perciban el 100 % de su salario durante este período.
Otro de los factores que influyen en que las mujeres renuncien a amamantar a sus hijos es el "interés comercial de los fabricantes de leche artificial", que hace que muchas madres salgan del hospital después de dar a luz "con una lata de leche de fórmula bajo el brazo", dijo Muriel Stachon, una de las manifestantes.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida, y el mantenimiento de esta práctica hasta los dos años o más.