ZAGREB.- La canciller croata de Relaciones Exteriores, Vesna Pusic, afirmó este jueves que
el croata presuntamente decapitado el miércoles por el grupo Estado Islámico (EI) en Egipto, fue secuestrado primero por una banda de delincuentes antes de ser entregado a los yihadistas.
Según la titular de Exteriores también se pidió un rescate, pero las condiciones cambiaron después.
"Dos organizaciones" estaban involucradas en el secuestro del croata Tomislav Salopek, que trabajaba en Egipto para una empresa francesa de exploración del subsuelo.
"Una de ellas se presentó como el Estado Islámico 'Provincia del Sinaí', y la segunda imaginamos que se trataba simplemente de bandidos (...) que pidieron un rescate" a la compañía, explicó Pusic en una rueda de prensa en Rijeka.
Tomislav Salopek "fue secuestrado el 20 de julio. Ocho días después, se pidió dinero por él. Pero sus secuestradores no volvieron a dar señales hasta el 5 de agosto", explicó.
Ese día Provincia del Sinaí, la rama egipcia del EI, difundió un vídeo en el que se veía al croata arrodillado a los pies de un hombre que, cuchillo en mano, leía un papel en el que se pedía liberar a "mujeres musulmanas" encarceladas para evitar la ejecución de Salopek en un plazo de 48 horas.
"La situación cambió totalmente. La cuestión del dinero desapareció por completo", tras la aparición del vídeo, explicó Pusic.
El miércoles, el EI afirmó que había asesinado a Salopek y difundió una foto de un cadáver decapitado, cuya autenticidad aún no se ha podido verificar.
Las autoridades croatas afirman que la búsqueda del rehén continúa.
"Mientras exista la posibilidad de que esté vivo, seguimos buscándolo", dijo Pusic, explicando que la foto difundida por el EI no es "la única información de la que disponemos".
