BOGOTÁ.- La canciller de Colombia, María Ángela Holguín, refutó hoy al presidente venezolano, Nicolás Maduro, quien aseguró que su Gobierno le entregó la semana pasada un documento con seis puntos para reabrir los principales pasos fronterizos entre ambos países.
Según Maduro, ese documento fue presentado por su país en la reunión que Holguín mantuvo el pasado 26 de agosto en Cartagena con su homóloga venezolana, Delcy Rodríguez, para intentar superar la crisis.
"No entregaron ni un solo documento por escrito, ninguno. No se entregó nada", aseguró Holguín en una conferencia de prensa en el Palacio de San Carlos, sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia.
Desde hace dos semanas, 1.381 colombianos han sido deportados desde Venezuela y unos 10.000 más han optado por abandonar el vecino país ante el miedo de correr la misma suerte que sus compatriotas, a raíz de una campaña del Gobierno de Maduro para combatir el contrabando y a supuestos paramilitares.Holguín repasó hoy los argumentos del Gobierno de Maduro para cerrar la frontera y decretar medidas de excepción en diez municipios del estado venezolano de Táchira, fronterizo con Norte de Santander (Colombia).
En primer lugar, Maduro acusó a Colombia de no controlar el paramilitarismo, a lo que Holguín respondió que su país ya acabó con ese fenómeno y que lo que hay ahora en la frontera son "bandas criminales dedicadas al narcotráfico y al contrabando".
La canciller colombiana reveló además que el Gobierno venezolano "había cancelado o aplazado 15 reuniones" para tratar este tema desde que en agosto de 2014 los presidentes de ambos países se reunieron también en Cartagena.
"Nosotros hemos estado permanentemente pendientes de las reuniones, nuestras Fuerzas Militares han estado pendientes y el Gobierno venezolano las ha aplazado", dijo Holguín, quien agregó que "es imposible" tener éxito en la lucha contra el contrabando si no se celebran las reuniones bilaterales pactadas.
La ministra añadió que el Gobierno venezolano también acusa a Colombia de falta de control en el contrabando fronterizo, pero la verdad es que si la gasolina y los productos venezolanos entran ilegalmente en territorio colombiano es porque las autoridades del país vecino permiten su salida.
Ante otra acusación venezolana, de que los colombianos son los causantes de la pérdida de valor del bolívar, la moneda venezolana, supuestamente por acción de las casas de cambio de la ciudad fronteriza de Cúcuta, la canciller también mostró su sorpresa.
Holguín explicó que el argumento venezolano de que Colombia debe modificar su régimen cambiario es algo que no se puede hacer "ni porque un país lo pida".
Entre las demandas venezolanas a Colombia están las de cerrar los puestos de cambio en Cúcuta, causantes, según Maduro, del elevado tipo de cambio entre el bolívar y el dólar.
La canciller aseguró que en el encuentro con su colega en Cartagena pareció que estuvieran "en dos reuniones distintas", porque mientras Colombia quería discutir soluciones a la crisis, Venezuela insistía en exigencias ajenas a la agenda, como "ejercer mayor control sobre los medios de comunicación" para evitar que mostraran el éxodo de colombianos en la frontera.
"La respuesta de Colombia fue: aquí hay libertad de expresión y ese es un tema que no se discute", aseveró la ministra colombiana. "Nosotros no podemos, por abrir o cerrar una frontera, negociar absolutamente los valores, creencias y los modelos políticos y económicos que el país decida", sentenció Holguín.