Reuters
CARACAS.- La coalición opositora venezolana Mesa de la Unidad Democrática (MUD) rechazó este martes el decreto de estado de excepción en tres municipios del noroccidental estado Zulia por "inadecuado" y llamó a los gobiernos de Colombia y Venezuela a dialogar para encontrar una solución a la problemática fronteriza.
"Rechazamos por inadecuado y contraproducente el estado de excepción en los municipios de la frontera del estado Táchira y del Zulia, de la misma manera que las medidas de control policial y militar asociadas al mismo", sostuvo durante una rueda de prensa el diputado Timoteo Zambrano.
Para la alianza opositora el decreto de estado de excepción en 10 municipios del occidental Táchira que rige desde el pasado 21 de agosto junto con el ordenado ayer para tres localidades del Zulia "viola los convenios y tratados firmados por Venezuela".
A juicio de la plataforma, la decisión del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de decretar el estado de excepción en estas entidades, junto con el cierre fronterizo en las mismas, tiene entre sus objetivos "enrarecer" el clima electoral en estos municipios de cara a las legislativas del 6 de diciembre.
La MUD solicitó al ejecutivo levantar el estado de excepción y reconoció que el gobierno "en el ejercicio legítimo de sus competencias puede deportar a ciudadanos extranjeros que se encuentran en situación ilegal dentro del territorio venezolano", en alusión a los cientos de colombianos afectados por esta medida.
"Sin embargo, deben respetarse sus derechos humanos, garantizarles el debido proceso y no está permitida la destrucción de su propiedad privada", agregó.
La coalición opositora, en voz de Zambrano, invitó tanto a Maduro como a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, a "entablar un diálogo franco y directo para encontrar soluciones bilaterales integrales a un problema que es conjunto".
Desde la MUD, sostuvo el diputado, ven con buenos ojos la mediación en la problemática fronteriza de los gobiernos de Brasil y Argentina a través de sus cancillerías, "así como la intermediación del Gobierno uruguayo".
Sin embargo, pidió al ejecutivo venezolano reconocer "su responsabilidad en el manejo de la crisis después de más de tres lustros de injustificables omisiones en hacer respetar las leyes de la República en la frontera".
