SACRAMENTO.- El Senado de California aprobó una norma que permite a los médicos poner fin a la vida de pacientes con enfermedades terminales.
Pese a lo anterior, la aprobación depende del gobernador demócrata del estado, Jerry Brown, quien tendrá que firmar la nueva ley para que entre en vigor y ha mantenido en secreto su posición al respecto hasta ahora.
La norma contempla que para que se pueda poner fin a la vida de su paciente dos médicos tienen que confirmar que al enfermo le quedan como máximo seis meses de vida.
En cuatro estados del país -Oregón, Washington, Montana y Vermont-, se permite este tipo de muerte asistida. Los defensores de la medida esperan que California, en el oeste de Estados Unidos, se convierta en una especie de punto de inflexión que permita lo que denominan una "muerte de digna" para los enfermos terminales.
La decisión del Senado se tomó tras una semana de debates. Los opositores a la ley argumentan que favorece a los familiares u otros interesados en la muerte de los enfermos terminales. También grupos religiosos se opusieron a la iniciativa.